El Grupo de Estudios de la Naturaleza (GEN-GOB) denunció ayer un proyecto para abrir una nueva cantera «en el interior de uno de los parajes protegidos mejor conservados de Ibiza», en la zona de sa Granada.

En un comunicado, los ecologistas indican que la empresa extractiva Can Escandell S.L., integrada por el Grupo Matutes y por la empresa MAB, «conocida concesionaria de la autovías de Ibiza», tramitan este expediente, que actualmente está en exposición pública.

El GEN advierte de que el expediente prevé la apertura de una nueva cantera, que se explotaría durante 35 años en la zona de sa Granada, catalogada como Área Natural de Especial Interés (ANEI) según la Ley de Espacios Naturales (LEN) y como Lugar de Importancia Comunitaria (LIC), en cumplimiento de la Directiva de Hábitats.

«Según la propia ficha del ANEI y LIC, se trata de uno de los parajes naturales mejor conservados de la isla, lo que recoge la propia evaluación ambiental que se expone al público», dicen los ecologistas.

El GEN afirma que el proyecto presentado afectaría a unos 100.000 metros cuadrados de terreno (10 hectáreas) y que la extracción prevista superaría los 3 millones de metros cúbicos de áridos.

La entidad ecologista la describe como la «cantera fantasma» ya que se está tramitando bajo el título de «Adecuación del Plan de Explotación y Plan de Restauración de la cantera s’Espartar», que afecta a parcelas del municipio de Sant Antoni de Portmany, ubicadas en terrenos forestales «donde no existe ninguna cantera».

Según explica, la cantera «no aparece en el Plan de Canteras de las Islas Baleares de 1999 y únicamente, tras la Ley 10/2014 de ordenación minera de las Islas Baleares, aprobada para facilitar la apertura de nuevas canteras, aparece misteriosamente listada en el Registro Minero de las Islas Baleares».

Los ecologistas sospechan de que «se ha podido facilitar documentación falsa a la administración competente» vinculada a la cantera de ses Canyes, perteneciente al Grupo Matutes y a MAB para suministrar los áridos de la construcción de las autovías en 2005.

También aseguran que «se da la circunstancia» de que hace años, en un extremo de la parcela se hizo una excavación con un acceso rodado «precisamente para simular la existencia de una cantera en la zona».

El GEN recuerda que ya denunció en 2005 «las maniobras existentes para poner en marcha una nueva explotación de áridos que iría vinculada a la construcción de las autovías».

En aquel momento, según destacan, MAB y el Grupo Matutes «adquirieron la cantera de ses Canyes y parece que los terrenos donde planifican la nueva cantera».

Ahora, con la reciente aprobación del Plan de Carreteras y del proyecto de la autovía en ca na Negreta, «se esperan de nuevo la apertura de canteras», advierten.

Para los ecologistas, «permitir la explotación de esta cantera, a parte de una ilegalidad, supondría la pérdida irreparable de la sierra de sa Granada, espacio natural de incalculable valor ambiental y paisajístico, protegida por legislación autonómica y europea.

«Este nuevo monstruo haría desaparecer, literalmente, otra montaña de la isla», denuncia el GEN. Por ello, los ecologistas hacen un llamamiento «a la responsabilidad de las instituciones para que, de una vez, se defienda el interés general y se impidan de una vez y por todas este tipo de maniobras».