La Policlínica Nuestra Señora del Rosario ha abordado recomendaciones sobre la autoexploración mamaria, que si bien «no es una herramienta de diagnóstico», «sí que nos va a ayudar a detectar alteraciones en la mama que indicarán que debemos consultar a un especialista».

Según ha indicado la entidad sanitaria en un comunicado, los objetivos de la autoexploración mamaria son «detectar, por un lado, alteraciones superficiales en la mama (piel y areola-pezón), y por otro lado, alteraciones profundas (nódulos)».

«Desde la Unidad de Patología Mamaria de Policlínica Nuestra Señora del Rosario recomendamos la autoexploración mamaria, pero es el médico y las pruebas diagnósticas, como la mamografía o la ecografía, quien nos va dar el diagnóstico definitivo», reiteran.

Según los especialistas, es conveniente comenzar la autoexploración «tras la primera regla, conocer nuestra mama y lo que es normal o no en ella».

En cuanto a la frecuencia, en edad fértil, las exploraciones deben realizarse cada tres a seis meses. Y con la menopausia, de uno a tres meses. «Está bien coger una rutina, por ejemplo, en el momento de la ducha», precisan.