La evolución de las cifras de visitantes y turistas en Balears durante los próximos años se verá afectada por la recuperación de los principales destinos competidores en el Mediterráneo, caso de Turquía, Egipto y Túnez.

Este verano, los touroperadores han registrado niveles de ventas más que positivas en estos países, que recuperan de forma progresiva la cuota de mercado perdida por atentados terroristas y las revueltas (primavera árabe) entre 2012 y 2015, lo que en la industria se ha dado en llamar problemas geopolíticos.

El último informe de Exceltur cifra en un alza del 45 % las reservas turísticas en Turquía durante la pasada temporada de verano y en un 44 % en Egipto. Túnez, tras bajar los precios a cotas inimaginables, se sitúa en los mismos porcentajes. El turismo ruso ha encontrado en este país norteafricano un auténtico filón, de ahí la apuesta de los touroperadores para aumentar vuelos de cara a 2018.

Evolución

Balears, a causa de estos problemas geopolíticos, ha recibido en 2014, 2015, 2016 y 2017 cerca de 1,5 millones de turistas prestados al año. Cantidad que a corto y medio plazo volverá a los destinos competidores, siempre y cuando no se produzcan más atentados o revueltas sociales. Esto, quizás, atempere los ataques de turismofobia, pero también es cierto que se notará en los ingresos, gasto turístico y ocupación hotelera. Al margen queda toda la oferta de alquiler turístico, que es una incógnita cómo actuará para no perder reservas y actividad productiva.

La previsión es que las fuertes medidas de seguridad que se han establecido en estos países, principalmente en Túnez y Egipto, hará que los touroperadores alemanes y británicos incrementen su programación de vuelos el próximo año y venideros.

«Sin conectividad aérea es imposible poder recuperar la normalidad, por lo que los gobiernos de Egipto y Túnez están dando todas las facilidades, tanto en incentivos fiscales como en subvencionar plazas de avión y rebajar el precio de los paquetes turísticos hasta en un 50%», señalan cadenas hoteleras de Balears y desde los grupos Thomas Cook y TUI.

En la próxima feria de la World Travel Market de Londres, entre el 6 y el 9 de noviembre, estos países norteafricanos van a echar el resto en materia de promoción. Los ministerios de Turismo darán a conocer los logros en materia de seguridad y las medidas que han adoptado a lo largo de 2017. Pondrán como ejemplo la tranquilidad que ha habido este verano y el incremento de reservas, que han sido espectaculares. Sin duda alguna, es la prueba de algodón de que se está instaurando, poco a poco, la normalidad y de que regresan con fuerza.

Los touroperadores, entre ellos Thomas Cook y TUI, están aprovechando esta circunstancia para presionar a los hoteleros de Balears. Llevan cuatro años asumiendo religiosamente los incrementos de precios que les piden los empresarios de las Islas, en torno a un 20 por ciento de media en el global, y ahora ven la oportunidad de no aceptar o, en su caso, rebajar precios.

La amenaza velada de que Balears es un destino caro y que los competidores están bajando precios está calando.

Grecia, que ha pulverizado todos sus récords turísticos este verano, continúa en línea ascendente, pero la implantación de un impuesto turístico a partir de enero próximo, visto lo visto, es toda una incógnita.

Croacia sigue en positivo y también con récords de visitantes y ocupación hotelera. Los destinos turísticos de Italia, tanto en el Mediterráneo como en el Adriático, evolucionan al alza. Malta se mantiene y la Riviera Francesa sigue en positivo. Todo ha cambiado.

EL APUNTE

Los gobiernos del norte de África extreman la seguridad

El temor a nuevos atentados terroristas en los países del norte de África no ha cesado, de ahí que los gobiernos de Egipto, Túnez y Marruecos, a los que hay que sumar Turquía han extremado al máximo sus medidas de seguridad. Hay mucho en juego, más aún cuando más del 60% y 70 % de su economía depende de la industria turística. El último gran atentado en Túnez, con una veintena de turistas alemanes y de otras nacionalidades muertos, marcó un antes y un después en Túnez, así como en el resto de países de la primavera árabe. Los grupos turísticos y compañías aéreas han pedido a los gobiernos de estos países que las medidas de control y de seguridad tienen que ser extremas, ya que en caso contrario retiraban sus programas de vacaciones. Este verano todo ha funcionado bien, pero con la espada de Damocles sobre lo que va o no hacer el yihadismo.

EN CORTO

En la zona turca de Antalya ha crecido el turismo este verano un 65%sobre 2016

☛ En la principal zona turística playera de Turquía, Antalya, la llegada de turistas durante el pasado verano fue de un 65 %. Este enclave playero ubicado en la costa mediterránea cerrará el presente año con más de 10 millones visitas de turistas. Las autoridades políticas afirman que, tras un año 2016 considerado como nefasto (crisis con Rusia, los atentados del Daesh y el golpe de Estado), se ha apreciado en 2017 una rápida recuperación en la llegada de visitantes a Turquía.