Bomberos sofocando el incendio de ayer. | D. E.

Bomberos y brigadas del Ibanat extinguieron ayer por la tarde un incendio desatado a mediodía por una quema de rastrojos descontrolada en una finca de Sant Miquel.

Según informaron fuentes de los bomberos, las llamas acabaron afectando una zona de 500 metros cuadrados.
Hasta el escenario del incendio se desplazó una dotación de cuatro bomberos con un vehículo y posteriormente se incorporaron a los trabajos de extinción varios brigadistas del Ibanat con una autobomba.

Las mismas fuentes explicaron que el responsable de la quema no se encontraba en lugar cuando llegaron los bomberos. El fuego fue dado por extinguido a las 17.00 horas.