La puesta de sol y el arriado solemne de bandera dejó imágenes espectaculares con la silueta de Dalt Vila como testigo. | Daniel Espinosa

Más de 5.000 personas visitaron el portaaeronaves Juan Carlos I durante su estancia en Ibiza el fin de semana. La presencia del buque insignia de la Armada española tuvo una cálida acogida y las cifras provisionales así lo refrendan.

El Juan Carlos I pudo ser visitado el sábado y el domingo en sesiones matinales y fueron miles los vecinos de la isla y también turistas que no quisieron desaprovechar la posibilidad de conocer y recorrer las interioridades del mayor buque de guerra construido en España.
El interés despertado motivó que a media mañana del sábado ya se hubiesen contabilizado más de un millar de visitas, un baño de multitudes y un torrente de gente que deja unas cifras sobresalientes en cuestión de poco más de seis horas.

Los visitantes recorrieron el hangar y el garaje donde se encuentra el dique inundable antes de acceder a la cubierta, punto donde los asistentes podían fotografiarse con los Morsa, los helicópteros SH3D, o con los Mosquitos, el Hughes 500. Los más pequeños fueron los que más disfrutaron haciéndose retratos, mientras los adultos atendían las explicaciones de los miembros de la Infantería de Marina y de la tripulación del Juan Carlos I, el insigne visitante del muelle Botafoc.