El nuevo B250 estacionado en el aeropuerto de Menorca.

Casi un año después de haber entrado en servicio tras llevarse una contrato millonario de 25 millones de euros por cuatro años, la concesionaria del servicio del transporte aéreo en Baleares, Eliance, sigue operando sin cumplir ni con la antigüedad de los aviones ofertada, gracias a la que arrebató el contrato a la anterior adjudicataria, ni con dos condiciones de seguridad críticas para vuelos en helicóptero recogidas en el pliego de condiciones: multipiloto y vuelo instrumental.

Casi dos años en falso
Y la previsión es que no cumpla con el punto 5.2 del pliego de condiciones (ver imagen adjunta) que establece que «todas las operaciones de vuelo serán multipiloto, estarán compuestas por piloto y copiloto» y que «los pilotos y copilotos deberán disponer (...) de la habilitación de vuelo instrumental» hasta dentro de ocho meses. Dicho en otras palabras, casi la mitad del contrato sin cumplirlo.

A día de hoy la situación del servicio es la siguiente: el avión de Menorca cumple desde el día 14 de noviembre con la antigüedad prometida; el de Mallorca entrará en funcionamiento el próximo día 1 de diciembre, según la información facilitada in extremis por el Govern; y tanto el helicóptero con base en Ibiza como el que está en Mallorca y que funciona como backup, es decir, cubre cualquier incidencia de los otros tres aparatos titulares, no cuentan con los permisos de la Agencia de Seguridad Aérea Española (Asesa) para volar en multipiloto y en instrumental.

Con todas las reservas porque Eliance no contesta las preguntas de este diario y se limita a decir obviedades que nadie pone en cuestión, tales como que «cumplimos la normativa y que los helicópteros son los más modernos y equipados del mercado», parece que Eliance ha iniciado el proceso de formación de las tripulaciones para cumplir con los requisitos exigidos para vuelos en multipiloto y vuelos instrumentales.

Un asesor externo
Según desvelaron los sindicatos médico y de enfermería después de la última reunión de seguimiento con el Govern, el asesor externo que se ha visto obligado a contratar el Govern para saber el suelo que pisa y que es piloto profesional informó de que Eliance no dispondrá de la habilitación para volar en multipiloto y en instrumental hasta dentro de ochos meses. En el mejor de los casos.

Ante esta realidad, los dos sindicatos médicos han pedido al Govern dejar de volar con los helicópteros de dicha compañía hasta que esté todo en orden y sea verdad que «vuelan con las máximas garantías de seguridad», como repitió la consellera balear de Salud, la socialista Patrica Gómez, en una comparecencia monográfica en la Comisión de Salud del Parlament, solicitada por Ciudadanos.

También piden que Eliance asuma el coste de subcontratar el servicio en una tercera compañía que sí cumpla con dichos requerimientos. De momento, el Govern no ha contestado. En la próxima reunión del miércoles 27 sabremos si hay novedad al respecto.

Hasta ahora el control del contrato dentro de la comisión de seguimiento recae en Satse y Simebal, ya que el Govern excluyó de forma incomprensible al Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas (SEPLA), a pesar de haber sido los que denunciaron las irregularidades. «No entendemos que nos hayan dejado fuera», explican a este diario fuentes de la organización.

«Queremos estar porque los sindicatos sanitarios no saben de aviones y los políticos, tampoco y la normativa es compleja», insisten. Esta situación cambiará a partir del miércoles cuando también se sentarán en la mesa de la comisión de seguimiento.
Recientemente, también ha pedido tener voz en la comisión el Sindicato Libre de Trabajadores Aéreos (SLTA), mayoritario en el sector de aviones y helicópteros de emergencia, con un 60% de los delegados adscritos a este convenio en España.

Gato por liebre
Los expertos del Sepla y del SLTA consultados por este diario coinciden a la hora de negar que Eliance vuela con las máximas condiciones de seguridad porque los vuelos no se hacen en instrumental y en multipiloto, desmontado la teoría de la consellera.

«Máximas condiciones de seguridad es incompatible con que solo haya un piloto autorizado a tomar el mando de la aeronave y volar en modo visual con baja visibilidad o de noche. No hace falta ser un experto para darse cuenta de ello», insisten las fuentes consultadas.

Es más, los sindicatos ponen el grito en el cielo porque se ha dado un «paso atrás» en materia de seguridad, ya que la anterior empresa adjudicataria y que fue desbancada por Eliance gracias a una oferta que no cumple sí volaba en multipiloto e instrumental.

No solo es que están dando gato por liebre a la administración y al contribuyente ofreciendo un servicio por debajo del exigido y pagado, es que están jugando con la seguridad de los tripulantes, pacientes y sanitarios que están volando con dichos aparatos, coinciden los expertos consultados.

Multipiloto es imprescindible
En la retina del sector siempre está presente el accidente que se produjo en febrero de 1999, cuando fallecieron el piloto y el mecánico de un helicóptero que se estaba trasladando de Ibiza a Formentera a recoger un paciente en bajas condiciones de visibilidad.

«No estamos hablando de un asunto menor, es que si hay algún problema con el piloto, un simple mareo o indisposición, ha de haber alguien más que pueda manejar la aeronave y que cuente con los títulos y la formación para hacerlo», explican desde SLTA.

«No nos vale que el que va sentado al lado del piloto sepa pilotar, ambos han de tener los títulos y la formación para volar en multipiloto», insisten con vehemencia. «Puede ser el ministro Pedro Duque, que es piloto y astronauta el que vaya sentado, pero no puede tomar los mandos de la aeronave, si no tiene el título de multipiloto para ese aparato».

El papel lo aguanta todo
La oferta que le permitió a Eliance arrebatar el megacontrato del transporte aéreo sanitario a Badcok aguantó, como el papel, dos aviones de última generación, de tres y seis años, como propuesta estrella. La realidad es que durante el primero de los cuatro del contrato Eliance ha venido utilizando aviones de hasta 20 años en un caso y de 10 en otro.

Así pues, Eliance, el nombre comercial de la UTE Habock Aviation SL y Urgemer Canarias SL, birló el contrato de 25 millones de euros del transporte aéreo sanitario del 061 de Baleares a la empresa que venía prestando el servicio, «a plena satisfacción» en palabras de los sindicatos consultados, hasta entonces (Babcok Mission Critical Services España SAU), gracias a solo dos aspectos que a la postre resultaron claves: menor antigüedad de los aviones y más horas de vuelo.

Negociado sin publicidad
A pesar de que se trata de un contrato millonario de 25.530.000 euros más IVA por cuatro años de servicio, el Govern balear recurrió a un procedimiento negociado sin publicidad, al que solo se presentaron dos propuestas.

La realidad es que no abundan en el mercado empresas capaces de prestar el servicio tras el proceso de concentración de los últimos años. Así, lo que sería un escándalo en la adjudicación de la construcción de un edificio o una carretera, aquí se ha aceptado con normalidad por partidos y sindicatos.

Sin rebaja en la licitación
Ambas ofertas eran prácticamente idénticas, como demuestra que la ganadora obtuvo 91 puntos y la segunda 83. Solo ocho puntos de diferencia en la valoración de la mesa de contratación.

Babcok y Hadbck ofertaron el precio de salida de la licitación sin rebaja alguna. Los precios están tan ajustados que ofrecen poco margen de maniobra a las empresas, según los expertos consultados por Periódico de Ibiza y Formentera, quienes no descartan «pactos entre las empresas», como se daba en el caso cártel del fuego.

También calcaron ambos competidores la propuesta en cobertura adicional en la época estival y en formación. Así que había poco margen para la diferenciación.

Después de dos rondas de negociación abierta en la que Govern y las dos empresas se sentaron en la misma mesa y con las cartas boca arriba, la balanza se inclinó a favor de Eliance exclusivamente por dos mejoras: la antigüedad de las aeronaves y las horas de vuelo, como se puede leer en los documentos que acompañan esta página y que fueron desvelados por el portal aviaciondigital.com.

El resultado es que el contrato de 25 millones de euros fue a parar a manos de Eliance que empezó a prestar el servicio el 1 de diciembre de 2018.

Pero sin los dos aviones medicalizados B250 ofertados. Según el medio especializado, los dos B250 de la oferta contaban con 3 y 6 años de antigüedad respectivamente, lo que le valió a Eliance para llevarse 7 puntos clave frente a 3 de Badcok.

Sin embargo, las matrículas de los aviones que hasta ahora se han venido utilizando (EC-MUP y EC-KND) reflejan que cuentan con 10 y 20 años de antigüedad, lo que no supone ningún impedimento legal desde el punto de vista aeronáutico. Es solo un fraude.

Eliance obtuvo otros cuatro puntos de diferencia adicionales gracias a ofertar más horas de vuelo que su competidora, circunstancia que hasta ahora nadie ha puesto en cuestión.