Nueve meses de prisión. Es la pena que solicita el Ministerio Fiscal para una mujer que fue juzgada ayer en la sala de lo Penal número 1 de Ibiza por un delito de robo con fuerza en grado de tentativa ya que, según la acusación, fue sorprendida después de destrozar la cristalera de una tienda de Vila con una tapa de alcantarilla.

La magistrada Clara Ramírez de Arellano dejó el caso visto para sentencia tras celebrar el juicio en ausencia de la acusada, Montse E.R., que tiene antecedentes penales por otros robos en Ibiza y que ayer no se personó en la vista.

Los hechos juzgados se remontan a la madrugada del 26 de marzo de 2019, cuando la acusada fue sorprendida destrozando un escaparate de una tienda de la calle Ramón y Cajal de Ibiza con la «intención de acceder a la misma y llevarse los efectos de valor que encontrase, no consiguiendo su propósito al ser sorprendida por un hombre», señaló el representante fiscal.

El propietario del negocio reclama una indemnización por los daños causados en la puerta del establecimiento.

La defensa pide la libre absolución de la acusada y el Ministerio Fiscal solicita una pena de nueve meses de cárcel.

La acusada, vecina de Vila de 46 años, tiene numerosos antecedentes penales por hechos similares y ya fue condenada a 26 meses de cárcel en 2016.


Cazada ‘in fraganti’

Los hechos ocurrieron en torno a las 03.45 horas del pasado 26 de marzo. La acción de la mujer fue advertida por un hombre que vigilaba una obra próxima al negocio reventado y que alertó a la Policía Nacional.

El hombre escuchó el estruendo causado por los golpes que rompieron la cristalera al tiempo que saltaba la alarma del negocio.

A la llegada de la patrulla el hombre dio una descripción de la mujer. Minutos después, los agentes de la Policía Nacional localizaban y detenían a la mujer como presunta autora de un robo con fuerza en establecimiento abierto al público.