‘Agustinet’ posa para el Periódico de Ibiza y Formentera. | DANIEL ESPINOSA

Nos recibe Josep Marí Ribas Agustinet (Sant Josep, 1959) en la sede provisional de Agapito Llobet. Al mal tiempo buena cara. Es jueves por la tarde. Por la mañana Ibiza se había desayunado con la noticia adelantada por Periódico de Ibiza y Formentera de la baja del PSOE de Xico Tarrés. Él era de los pocos que conocía esta información porque así se la había transmitido telefónicamente el ex alcalde de Vila, ex presidente del Consell y ex secretario general.

Le advertimos que nos hubiera gustado hacer esta entrevista habiendo podido leer la ponencia política aprobada el pasado sábado en el IV Congreso de la FSE del que salió elegido secretario general, con un puñado de abstenciones, y que lamentablemente aún no ha sido facilitada a este diario. «Están incorporando enmiendas al texto definitivo», justifica algo que es difícil de justificar.

Ibicenco que parece gallego. Transita en la ambigüedad como cuando responde con evasivas a si será candidato al Consell d’Eivissa en 2023. Camina con pies de plomo, huye de titulares y de la polémica. Ya tiene bastantes incendios a su alrededor como para crear nuevos.

A pocos días del congreso le dimite el secretario general de la agrupación socialista de Santa Eulària, José Luis Pardo, su secretaria de organización, Mari Quintero, a su vez esposa de Vicent Torres, el anterior secretario general que no quiere ser delegado en el congreso y tampoco asiste al congreso extraordinario, hoy (por el jueves) hemos publicado que Xico Tarrés se ha dado de baja de militante… Convénzame de que el PSOE de Ibiza no está en crisis.

—Yo no veo ningún motivo para decir que estamos en crisis. Así me lo han transmitido las personas a las que hace referencia. En el caso de Xico Tarrés, no me consta que tenga que ver con ninguna cuestión referente a mi persona o a mi futura gestión. No sé si seré capaz de convencerle de que no hay crisis, pero no me siento para nada acusado, ni cuestionado.

—¿Con qué tres principales objetivos arranca su Secretaría General?

—El primer objetivo es mantenernos, seguir con el listón alto que tiene esta organización. Somos la primera fuerza política de Ibiza y mantenerse así ya es un objetivo bastante importante. El partido está fuerte, organizado y no es necesario que yo venga aquí a salvar nada. Estoy ilusionado, con ganas de hacer cosas, de aportar mi capacidad, la que tengo. Garantizo mucha dedicación, mucho trabajo. Confío en militantes, en la comisión ejecutiva, en mantener este partido en este nivel, y, si puede ser aumentar la representación, especialmente en aquellos sitios donde no tenemos tanta.

—Primera fuerza política en las Elecciones Generales de abril y con un resultado mucho más ajustado en las de noviembre. Sin embargo, en las municipales y autonómicas de mayo no fue la lista más votada y están en la oposición.

—-Las elecciones locales y las nacionales a veces no tienen el mismo resultado...

—Eso es evidente. ¿Qué pasó?

—-(Silencio). A lo mejor se ha de trabajar esta cuestión y preguntarnos por qué tenemos un nivel de apoyo distinto en las nacionales que en las locales...

—Eso es lo que le estaba preguntando…

—-Se ha de analizar, yo no soy capaz de hacer un análisis exhaustivo, porque no soy politólogo, ni sociólogo, ni antropólogo, ni nada de todo esto, soy un aficionado a estas cosas. En cualquier caso, hay municipios donde el nivel de voto, por lo que sea, es mayor en las nacionales que en las locales. Quizá pueda ser por una cuestión de implantación, de nuestros candidatos locales. Revisar esta situación es trabajo del partido. Esto es así, no podemos cambiar las voluntades de la gente, la gente vota lo que quiere.

—Es obvio que se refiere a Santa Eulària y Sant Joan. ¿Por qué se da esta circunstancia?

—-Quizá sea acierto del PP en estos sitios, donde ha sido capaz de generar más confianza, de tener más gente implicada. Hemos de trabajar, analizar más, mesa por mesa, hablar con más gente, conseguir más afines…

—¿Cree que pueden haber influido las diferencias de criterio del PP y del PSOE en ordenación del territorio en esos municipios más que en otros?

—No tiene respuesta sencilla esta pregunta porque la ordenación del territorio es un asunto muy complejo. Cuando hablamos de continuar segregando para que un hijo se pueda hacer una casa, a qué nos referimos, a que solo lo podrán hacer los ibicencos, o también lo podrá hacer un sueco que tiene una casa aquí desde hace años… Construir en suelo rústico es una excepción, un propietario no tiene derecho de entrada, está prohibido…

—En España, con una parcela mínima de 14.000 metros puedes construir…

—Si te autorizan, sí. Pero hay otras leyes y planes territoriales que restringen esta posibilidad y zonas donde está prohibido. El PP utilizó las prohibiciones que dicen que hacemos para atacarnos, como siempre. En nuestro partido tenemos amplia experiencia en protección del territorio. Esta ha de ser efectiva y pensamos que es correcto el sentido de la última modificación el PTI.

—Hay consenso en que es deseable un amplio acuerdo político, al menos PP-PSOE, en ordenación del territorio.

—Ojalá nos pusiéramos de acuerdo en un modelo, un marco, donde pudiéramos estar de acuerdo. El problema es que siempre que hacemos una modificación, al PP no le gusta mucho, aunque luego no la modifica tanto. Protesta mucho, hace mucho ruido, se convierten en modificaciones polémicas y nunca hemos podido llegar a un acuerdo. El PP ha de partir de una idea de que Ibiza ha de tener un techo aceptable. Nos encantaría llegar a un acuerdo y que haya una norma estable.

—Cuando dice techo, ¿a qué se refiere exactamente? ¿A poner límites a la entrada de personas o vehículos, como han hecho en Formentera?

—(Risas). No lo sé. Si seguimos creciendo indefinidamente, quizá debamos tener que hablar de ello. De momento, cuando digo techo me refiero a capacidad de crecimiento… Hasta ahora, el 90% del crecimiento en suelo rústico ha sido para construir mansiones para gente que las puede pagar, muy poco de ese crecimiento ha sido para viviendas para gente ibicenca. Si se trata de seguir haciendo esto, nosotros no sé si estaremos demasiado de acuerdo porque habrá un momento en que no cabremos aquí. El suelo rústico se ha de proteger. Si hemos de hablar de vehículos, hablemos.

—¿Está masificada Ibiza?

—Algunos meses del año, un poquito. Por eso, nuestra política turística ha intentado estirar las temporadas por los extremos y en parte lo hemos conseguido y ha bajado algo la punta del mes de agosto, creo que es bueno para el sector turístico.

—¿Le gustaría que viniera menos gente el mes de agosto?

—-No. Tenemos una capacidad, la llenamos, tenemos algunas infraestructuras que van saturadas. Lo que digo es que hay gente que no quiere venir en agosto precisamente por la gran cantidad de gente que hay. Empezar la temporada en abril y acabar en noviembre sería lo ideal. Hay meses en que estamos un pelín llenos ciertamente.

—Hay un cierto consenso en que el agua y la vivienda son los dos principales problemas de Ibiza.

—Estoy de acuerdo. Son dos problemas gordos.

—¿Qué soluciones ve?

—La vivienda está muy condicionada a la demanda turística y al efecto de los pisos turísticos. La vivienda ha de destinarse al alquiler a residentes y trabajadores, pero se ha venido destinando al mercado turístico, a través de plataformas que son casi turoperadores, lo que nos ha restado capacidad habitacional. Si el mercado privado no resuelve esta carencia, deberemos hacer más pisos públicos, de alquiler principalmente, que es lo prioritario. Algunas administraciones ya han empezado, Ayuntamiento de Vila y Govern, el Consell también debería implicarse en este asunto. Dos, agua.

—Espere. Los pisos turísticos están prohibidos, luego ya tenemos la solución a este problema. En cuanto a las viviendas públicas, soy escéptico porque los ayuntamientos no tienen suelo para ceder, para que lo haya, ha de haber planes aprobados y para que haya planes aprobados ha de haber agua, un PTI… Veo una tormenta perfecta para que esto no se solucione.

—Es posible, desde la administración no podemos resolverlo todo. Confieso que no soy un gran experto en la materia. Los pisos turísticos están prohibidos pero falta inspección, aunque no podemos tener un inspector para cada piso turístico. Vuelvo al agua. Este es un problema heredado, durante muchos años no lo hicimos todo lo bien que hubiéramos debido, extrajimos demasiada agua del subsuelo y ahora los acuíferos están dañados… Hay momentos de mayor demanda en los que tenemos dificultades para abastecer agua de calidad a todo el mundo y lo debemos arreglar con medidas de ahorro, penalizando los consumos elevados, a lo mejor no hay que dar toda el agua a los grandes consumidores…

—¿Hacen faltan más desaladoras?

—-Abaqua dice que no.

—¿Y Marí Ribas?

—Tienen razón los técnicos del Abaqua cuando dicen que con una desaladora tendríamos suficiente. Una sola, grande, con una red de distribución potente, depósitos reguladores y un sistema que funcione. El problema no es tanto de capacidad de producción, como de distribución, de almacenamiento, de mejora de redes para evitar fugas… En Sant Josep, teníamos una red muy antigua, la hemos renovado casi toda, hemos gastado mucho dinero, en otros sitios también lo están haciendo. Yo creo que no hemos de hacer otra desaladora, pero quizá ampliar las que tenemos, combinándolo con medidas de ahorro y otro tipo de medidas.

—¿Es viable el traspaso de la competencia del agua?

—Debería ser viable. La fórmula me da igual, podían traspasar la gestión pero no la competencia, por temas del Estatut. A mí me interesa la gestión, resolver un problema con un recurso básico y poder reutilizar el agua depurada y no tirarla al mar. Ahora no está salada, ahora es buena.

—Pero no me queda claro si está a favor de este traspaso

—Yo sí, siempre lo he estado. Traspasar la competencia no sé si puede traspasar del todo, pero la gestión sí... Yo estoy de acuerdo en que se traspase el agua, siempre lo he estado.

—¿Y las residencias geriátricas?

—La gestión más cercana es mejor, pero ha de venir bien dotada. El Consell tiene capacidad técnica y humana para asumir el agua y las residencias. Tenemos que hacer estudios económicos para que lleguen bien dotadas.

—Como le he dicho al principio, esperaba tener la ponencia política antes de hacer esta entrevista. ¿Piden en ella nuevas competencias para el Consell?

—(Se lo piensa). No lo recuerdo. He de confesar, que la leí en diagonal, no la redacté yo, hay un equipo redactor de mi máxima confianza… Me parece que no, que no pedimos más autonomía para el Consell d’Eivissa, al menos no en estos términos.

—Usted es jefe de la oposición de alguna manera…

—No, no, en absoluto. El jefe de la oposición es Vicent Torres.

—Usted es el líder del principal partido de la oposición y, por lo tanto, le corresponde hacer oposición. ¿Qué valoración hace del gobierno de Vicent Marí?

—Vicent (Marí) aplica mucho las formas, que le han funcionado muy bien durante muchos años, de ser alcalde de un gran municipio, un pueblo muy importante…

—¿Cuáles son esas formas?

—Gobernaba un municipio con mayoría absoluta, ahora no la tiene y gobierna en coalición. Yo creo que se está ubicando en el Consell. Es muy dialogante, lo reconozco, tengo una buena relación… no sé si puedo decir de amistad, creo que sí, pero no me quiero…

—No me quiere dar este titular…

—(Risas). No, no, no es eso, el concepto amistad cada uno lo entiende a su manera. Tenemos una relación muy cordial, somos alcaldes de dos municipios complejos, con núcleos dispersos, con una gestión complicada, extensos, coincidíamos bastante en muchas cosas. Estábamos juntos en la Felip, compartíamos muchas cosas. Él es presidente, yo soy alcalde y ahora tengo una nueva responsabilidad. Hago una valoración de que está empezando, espero que nos hagan caso a nuestras propuestas y que nos entendamos.

—Una de las apuestas políticas de Vicent Marí ha sido reclamar al Govern modificar los convenios en los que el Consell d’Eivissa cofinanciaba proyectos autonómicos. ¿Está de acuerdo?

—Yo estoy de acuerdo con lo que hizo mi partido, que fue impulsar proyectos importantísimos como la Escuela de Hostelería. Este intento me ha parecido peligroso, luego rectificó en parte, y pidió negociar, pues que negocie pero sin poner en cuestión los proyectos que son buenos para Ibiza. Había ganas de diferenciarse del anterior gobierno, que esto nos pasa a todos cuando entramos en una institución, pero yo no estoy tan de acuerdo.

—Así pues, ¿usted está de acuerdo en que el Consell d’Eivissa financie proyectos de competencias autonómica?

—Si lo ha de financiar para que los consigamos, sí. Pienso que en otros sitios debe de pasar más o menos lo mismo, no creo que seamos distintos…

—No. En Mallorca el Consell de Mallorca nunca ha financiado proyectos del Govern, tal como hemos publicado en Periódico de Ibiza y Formentera, y en Menorca, tampoco...

—¿Qué quiere decir, que nosotros, los ibicencos, somos menos espabilados diríamos que en otros sitios?

—Aquí las preguntas las hacemos nosotros, no al revés, pero en otros sitios el Consell no financia proyectos del Govern…

—Lo importante es que se hagan los proyectos, hemos de conseguir que se hagan.

—¿El Govern debe financiar la segunda fase del Palacio de Congresos?

—Debería colaborar. Si en Mallorca ha participado, en Ibiza también debería colaborar.

—Nos queda poco tiempo. Volvamos al partido y su Secretaría General que llega después de la dimisión de su predecesor, de una gestora y de un congreso extraordinario. ¿Qué opinión tiene de Marta Díaz?

—(Silencio). Una persona que ha trabajado mucho tiempo para el partido, que ha tenido un papel muy importante, ha sido vicepresidenta segunda del Consell, una persona muy próxima al anterior presidente, que hizo muchas cosas, conoce bien la administración, es buena jurista… Tuvo esta cuestión de no justificar algunos gastos, que dio motivo de titulares, lo que acabó con su dimisión como miembro de nuestro partido, esto fue el origen. Fue compañera de nuestro partido y ahora no lo es. Aquí me quedo.

—¿Y de Vicent Torres?

—Magnífico secretario general, presidente que trabajó para Ibiza, luego no ganamos las elecciones y ahora está de jefe de la oposición.

—¿Seguirá como portavoz del Grupo Socialista?

—Si él quiere seguir, seguirá, no tengo plan B en este sentido.

—¿Forma parte de su equipo?

—No, no forma parte de mi equipo. Él dijo que no participaría en el congreso, lo puedo entender. No tengo problemas con él, él trabaja en el Consell y espero que siga.

—¿Cómo se le queda el cuerpo cuando recibe la llamada de Xico Tarrés anunciando que se da de baja de partido?

—No recuerdo exactamente que me dijera que se daba de baja… que pensaba en darse de baja. No me gustó nada que se fuera. Hemos sido compañeros de muchas batallas políticas, lo aprecio. No me gustó, no me gusta que se haya ido. Lo respeto porque todo el mundo hace lo que considera.

—El Gobierno de Pedro Sánchez ha empezado como un tsunami, salimos a sorpresa diaria. ¿En qué espera que noten los ibicencos el gobierno de Sánchez?

—Lo primero es que tenemos Gobierno. Hay gente que quizá no necesite un gobierno, pero otros muchos sí. Ha tomado alguna medida importante, como la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) y el sueldo de los funcionarios. Ojalá hubiéramos ganado por mayoría absoluta, pero es un gobierno de coalición y las primeras medidas son correctas.

—¿Le hubiera gustado más una coalición con Ciudadanos?

—Me hubiera ido bien con Ciudadanos, pero Ciudadanos no quiso gobernar con el PSOE. Yo gobierno con Unidas Podemos en Sant Josep y pienso que podemos entendernos bien. Han moderado mucho sus pretensiones. La verdad es que me frustró aquella máxima de Ciudadanos de que no quería vernos. Una agrupación política central, que quiere ser bisagra entre partidos, no puede hacer este discurso y quizá ya lo haya pagado. Unidas Podemos es una apuesta buena de futuro.

—Cataluña será un asunto central…

—He estado y estoy muy preocupado, todos tenemos lazos afectivos con Cataluña. Yo no soy independentista, pero amo Cataluña, ha sido bandera, tengo familia, mis hijos han estudiado allí. La línea de diálogo es la que toca, judicialmente no se arregla demasiado.

—¿Hay que indultar a los líderes separatistas encarcelados?

—No sé. No contestaré esta pregunta.

—¿Qué lista de deberes le pone a Sánchez?

—La parte fiscal del REB y tenernos más cerca, que me consta que nos tiene cerca en lo emocional. Y mejoras de todo tipo, el Parador, el nuevo convenio de carreteras, la gestión de ayudas de fondos europeos, la depuradora de sa Coma… Lo importante es que haya gobierno y que se desatasquen cosas, eso no solo depende del presidente.

—No me ha citado el plus de insularidad.

—No tengo la lista. Efectivamente se ha de resolver para mejorar la situación de los funcionarios del Estado aquí, especialmente la Guardia Civil y la Policía Nacional.