El escritor ibicenco Vicente Valero en una imagen de archivo. | Daniel Espinosa

Ayer lunes llegó a las librerías de toda España la nueva novela del novelista, poeta, ensayista y traductor ibicenco Vicente Valero (Ibiza, 1963). Se trata de la obra Los enfermos antiguos y al igual que sus cinco trabajos anteriores ha sido publicado por Editorial Periférica. Tiene 144 páginas y un precio de 15,44 euros. La presentación oficial tendrá lugar este jueves a partir de las 20.00 horas en la conocida librería madrileña La Central de Callao.

De nuevo, la Ibiza de su infancia
Tras el éxito cosechado en 2016 con su antepenúltima novela, Las Transiciones, ambientada en Ibiza durante los años de la muerte del dictador Francisco Franco y los de la Transición, Valero vuelve a mirar al pasado. En esta ocasión, propone al lector un viaje hasta la isla de Ibiza que él mismo vivió en primera persona cuando era un niño, entre mediados de la década de los 60 del pasado siglo y el año 1975.
Algo que, según explicó ayer el escritor ibicenco a Periódico de Ibiza y Formentera, no es casual. Los enfermos antiguos forma parte «de un proyecto más amplio» que incluye su anterior novela y que se completará con un tercer volumen sobre el que prefiere no desvelar nada.
Aunque según Valero «las dos son novelas completamente independientes» tienen en común varios aspectos. El principal es ver como los protagonistas viven ese momento de transición desde la infancia a la adolescencia y desde la adolescencia a la madurez. También comprobar los cambios que sufrió una isla como Ibiza «que empezaba a asomar la cabeza desde una sociedad arcaica a una sociedad moderna y avanzada gracias a la llegada del turismo, los turistas y los trabajadores que vinieron atraídos por todo ello».

«Original mosaico de historias»
Las transiciones tiene como punto de partida el encuentro de unos amigos en el entierro de uno de ellos veinte años después. En cambio, para Los enfermos antiguos Vicente Valero apuesta «por la antigua costumbre social que había en Ibiza y en otras muchas partes de España de visitar a los enfermos».
A raíz de ello, y según se puede leer en la contraportada de la novela, el autor crea un original y atractivo mosaico de historias y retratos ambientados en los años de su infancia con los que consigue indagar en el estado de una sociedad que está a punto de asistir a la muerte de Franco y al comienzo de la Transición». Todo ello «con sensaciones encontradas, las propias de un viejo y anquilosado mundo que se derrumba, y en el que sólo el turismo reciente parece haber empezado a ejercer un papel novedoso y modernizador».
Un tiempo que, para el escritor ibicenco, es tremendamente interesante. «Son unos años que dan mucho de sí para la literatura ya que convivió una sociedad muy compleja y variada que estaba pasando de estar encerrada en sí misma durante siglos a abrirse a los muchos cambios que trajo el mundo del turismo siendo, incluso, laboratorio de aperturas políticas que ni siquiera se producían en la Península».
Sello propio
Partiendo de todo ello y de los recuerdos de su infancia en Ibiza más lo que le han contado los mayores, Vicente Valero vuelve a demostrar una gran pericia para narrar los hechos casi desde un punto de vista periodístico. Una vez más, vuelve a fusionar con gran éxito personajes reales que habitaron la isla desde finales de los sesenta hasta la muerte de Franco con otros surgidos de su prodigiosa imaginación. El resultado es, según la editorial Periférica, «situaciones y personajes tan cercanos como inolvidables».
Todo ello contado desde un punto de vista que, según explicó Valero a este periódico, «no es nada nostálgico ni sentimental sino todo lo objetivo que puede surgir de los ojos de un niño que vive también el cambio vital que supone su evolución de la infancia a la adolescencia»