GastroSerra o cómo aprender de los mejores

A por la Estrella Michelin
Uno de esos cocineros referentes es el malloquín Andreu Genestra, reconocido en 2015 con una estrella Michelin, que fue uno de los invitados en la primera jornada de este foro gastronómico.
«A veces se ve como una utopía el poder llegar a montar un restaurante, tocar la alta cocina o conseguir el sueño que es una Estrella Michelin, pero yo he llegado y no me ha ayudado nadie», explicó.
«Yo hablo el mismo idioma que los alumnos y creo que hoy día tenemos un deber moral los que nos dedicamos a esto de ayudar a abrir las cabezas a todos y motivar a que sigan el camino, porque van a encontrar muchas piedras y hay que saltarlas», añadió Genestra.
Así, mientras cocinaba un calamar en salazón de anchoa, fue explicando a los estudiantes «el valor del sacrificio» y cómo ha llegado a convertirse en uno de los cocineros más importantes a nivel nacional.
Empezó en la escuela de cocina a los 15 años. «Mi padre y yo nos sentamos un fin de semana y marcamos mi hoja de ruta hasta los 25. Una hoja de ruta que se cumplió», aseguró. «Estuve en País Vasco, Cataluña, Londres y Europa», explicó a los estudiantes. «Lo más difícil cuando empiezas a estudiar cocina es sentarte y pensar a dónde quieres ir», apuntó.

Texturas en chocolate
El pastelero Óscar Menéndez, fue el encargado de mostrar a unos 80 alumnos de los ciclos formativos, cómo elaborar postres «resultantes y creativos».
Lo hizo a través de dos elaboraciones: un mousse de chocolate con gel de fruta de pasión y plátano caramelizado y un tatiki de melón osmotizado con Martini.
«El 90% de un plato es lo que se ve y se pueden hacer cosas bastante interesantes y visuales con tan solo cuatro o cinco pasos», explicó a los estudiantes.
Este pastelero, lleva doce años en el mundo de la repostería. «He estado Dubai, Holanda o Londres. Este es un trabajo que te permite conocer mucha gente, viajar y moverte por muchos sitios», contó.
«Eso es lo que quiero hacer yo», decía Mari Grace, alumna de Cocina. «Tengo claro que voy a salir del país para poder conocer nuevas culturas, sabores y personas», señaló.
Para ella, Óscar fue toda una inspiración. Al igual que para Josep, otro de los estudiantes. «Que vengan chefs profesionales a mostrar sus técnicas es una gran aportación a nuestros conocimientos», aseguró.
Thais, alumna de Pastelería en el IES sa Serra, admitió que ella se plantea ya incluso «montar una pastelería. ¡Sería genial!».
Todos, muy atentos, tomaron nota de los consejos y las nuevas técnicas e incluso fotografiaron el resultado final para poder imitarlo a la perfección.