El equipo de rastreadores propio de las Pitiusas empezó con 12 personas y ahora son 21.

El Área de Salud de Ibiza y Formentera ha duplicado en un mes el equipo de rastreadores de coronavirus con el objetivo de cubrir la demanda asistencial que existe actualmente, vinculada al lógico aumento de casos. El equipo de rastreadores propio de Ibiza y Formentera se anunció a finales de julio y empezó a funcionar a principios de agosto con ocho enfermeras, dos técnicos en cuidados auxiliares de enfermería y dos auxiliares administrativos. En total, 12 personas que, tras confirmarse un positivo, empiezan a localizar a los contactos estrechos de esta persona (un contacto estrecho es quien ha estado en contacto con un positivo a menos de dos metros de distancia y durante más de 15 minutos sin las medidas de protección adecuadas). Debido al incremento de la demanda asistencial, el Área de Salud Pitiusa ha incrementado de 12 a 21 personas el equipo de rastreadores propio, por lo que ahora hay 13 enfermeros, seis técnicos en cuidados auxiliares de enfermería y dos auxiliares administrativos. Con el equipo de rastreadores propio en las Pitiusas, la función de búsqueda de contactos estrechos se dejó de hacer desde Palma a principios de este mes.

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A este dispositivo se añade la central de coordinación de coronavirus del Área de Salud pitiusa, que está formada por dos enfermeras (una de ellas, la coordinadora Sheila Palau), una técnico en cuidados auxiliares de enfermería y un auxiliar administrativo. Esta central de coordinación se encarga del seguimiento de contactos estrechos, de los cribados de coronavirus y de las pruebas a inmigrantes que llegan a las Pitiusas en patera, así como de la coordinación de las UVAC (las unidades de atención al coronavirus en domicilio). Cabe recordar, además, que a principios de este mes de agosto se volvieron a reactivar las cuatro UVAC avanzadas, formadas por médico y enfermera, en los centros de salud de Sant Antoni, Vila, Es Viver y Santa Eulària. Estas UVAC avanzadas (cuatro en Ibiza y una en Formentera) se suman a las básicas que ya funcionaban, por lo que desde principios de agosto hay nueve UVAC dando servicio en Ibiza y Formentera.

Petición al Ejército
En el conjunto de Baleares, la consellera de Salut, Patricia Gómez, envió el viernes una solicitud a la Secretaría de Estado de Sanidad para pedir formalmente la colaboración de 100 efectivos del Ejército con el propósito de reforzar las tareas de rastreo de casos de COVID-19. El Govern, por lo tanto, ha cambiado de idea, puesto que el martes, poco después de que el presidente del Gobierno pusiera a disposición de las autonomías hasta 2.000 rastreadores militares ya formados, descartó «de momento» esta posibilidad. «La Comunidad Autónoma [Baleares] cuenta con las herramientas necesarias para aplicar las medidas que se van decidiendo a través de las diferentes resoluciones firmadas por la consellera de Salut», manifestó el Ejecutivo autonómico en una nota para valorar el ofrecimiento de Pedro Sánchez de declarar el estado de alarma y ceder rastreadores militares a las autonomías. Baleares dispone en la actualidad de 190 profesionales dedicados al rastreo. Asimismo, se está formando a otros treinta que se prevé que se incorporen de forma inminente. Sin embargo, «ante el incremento de casos de los últimos días (alrededor de 300 o 400 diagnosticados diariamente de media) es necesario aumentar los recursos para continuar con la labor de búsqueda de casos, especialmente de los asintomáticos», defiende la Conselleria de Salud. Con la incorporación de este centenar de efectivos Balears dispondrá de 1,2 rastreadores por cada 5.000 habitantes, una tasa superior a la que recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS).