«Un modelo de paraíso único». Así se promociona Aguaduna, que ocupará 1.000 hectáreas y contará viviendas, hoteles, laboratorio de innovación, centros sanitarios y educativos. El 86% de la ciudad lo forman espacios verdes, dunas y áreas protegidas

La empresa de capital español Naurigas Emprendimientos, participada por las familias Matutes Mestre y Espallargas, comenzará a construir en 2021 la ciudad del futuro: Aguaduna, según ha revelado el diario económico Expansión. Ubicada en el municipio de Entre Ríos, en la costa norte del estado de Bahía (este de Brasil), esta urbe tendrá 1.000 hectáreas de superficie y ha sido concebida con una visión integral: inclusiva, inteligente, sostenible y replicable.

Según los promotores, el proyecto se convertirá en «un modelo de paraíso único en el mundo» ya que se caracterizará por la recuperación del equilibrio entre sociedad y naturaleza con el fin de mejorar la calidad de vida de sus habitantes y preservar el entorno.

La ciudad del futuro contará con viviendas, espacios educativos, un centro de innovación tecnológica, centros médicos e instalaciones turísticas, pero sobre todo predominarán los amplios espacios verdes como lagunas o dunas naturales.

El objetivo de este proyecto, que será desarrollado por la sociedad Seed Global Advisoring, es convertir Aguaduna en la ciudad más avanzada de Brasil. El proyecto contempla que sólo el 14% del terreno será urbanizado con edificaciones o carreteras, mientras que en el 86% restante se crearán áreas protegidas y zonas verdes. En declaraciones a Expansión, el responsable y portavoz del proyecto, Tarek Al Masri, explica que «la palabra sostenible se queda corta en este proyecto; es mucho más que eso. Las ciudades son organismos vivos que han dado la espalda históricamente a la naturaleza. Nosotros queremos que los habitantes o visitantes de Aguaduna tengan la oportunidad de establecer una relación única con el entorno».

Aguaduna es el primero de de los cinco proyectos urbanísticos similares que se construirán en los próximos tres años en diferentes países del mundo con la firma de la alianza de las familias Matutes Mestre y Espallargas, que cuentan con la participación, asimismo, de Siemens, el aliado tecnológico que marcará el desarrollo inteligente de estas ciudades del futuro. «Queremos construir al menos una ciudad de este tipo en cada uno de los continentes», asegura Tarek Al Masri, que reconoce que los socios están valorando la posibilidad de crear una de estas ciudades en España, «y si no puede ser, lo que tenemos claro es que construiremos una en Europa».

Uno de los pilares de esta futura urbe será la economía circular, orientada a reducir la contaminación, prolongar la vida útil de los productos y materiales y regenerar los sistemas naturales mediante el uso de energías renovables y el tratamiento adecuado de los residuos. Además, los promotores aseguran que Cidade Aguaduna tendrá un impacto «muy positivo» en su entorno, donde residen cerca de 400.000 personas en unas comunidades locales que se han involucrado en el proyecto, en el que trabajarán tanto durante su construcción como a partir del momento en que se inauguren los distintos equipamiento previstos.

«Brasil siempre ha sido muy vanguardista en la recepción de proyectos urbanísticos, y la verdad es que nos han dado muchas facilidades», relata Al Masri, que reconoce que una de las cuestiones clave ha sido confeccionar el sistema de seguridad de la ciudad, una tarea en la que está siendo crucial la tecnología que aporta Siemens.

Las familias Matutes Mestre y Espallargas, vinculadas al turismo y a la construcción, también mantienen una estrecha colaboración en proyectos en España y Perú.