El evento tuvo una parte gastronómica y una parte didáctica con la cofradía de Sant Antoni. | Marcelo Sastre

El muelle pesquero de Sant Antoni acogió ayer la cuarta gastrojornada que organiza Eating in Ibiza, el proyecto que ha puesto en marcha recientemente Fomento del Turismo en colaboración con el Consell d’Eivissa y PIMEEF.

En esta ocasión estaba centrado en el calamar y a ella acudieron en torno a una quincena de interesados. «Seguramente hubieran sido muchos más como demuestra que en apenas unas horas se agotaron las solicitudes por internet pero las restricciones impuestas por el coronavirus nos han limitado mucho y por ahora tenemos que ser responsables y mantener las distancias de seguridad y cumplir las normas», aseguró a Periódico de Ibiza y Formentera Zelia Sicot, dinamizadora del proyecto Eating in Ibiza.

La jornada tuvo varias partes. La primera consistió en una explicación por parte de miembros de la Cofradía de Pescadores de Sant Antoni de los métodos de pesca del calamar en las Pitiusas. Fue, según Sicot, «una magnífica oportunidad para recuperar parte de nuestra historia y descubrir algo de lo que no siempre se habla».

Dos chefs de lujo
Después, llegó el momento de chuparse los dedos. En esta ocasión participaron dos de los chefs con más prestigio de la isla de Ibiza, José Miguel Bonet, de Es Ventall, precisamente en Sant Antoni, y Óscar Molina de Ibiza Gran Hotel. El primero preparó un sorprendente bocadillo de pan brioche de tinta de calamar relleno de calamares muy pequeños salteados con un sofrito de cebolla y sobrasada y unos puntos de Alioli, mientras que Molina se decantó por una fideuá donde también el calamar era el gran protagonista. «Ha sido increíble y sorprendente porque han sido capaces de congeniar distintos sabores muy potentes en cada uno de los platos», comentó Sicot.

Dos magníficas recetas de calamar que fueron la excusa perfecta para luchar contra el frío, la lluvia y el pesimismo que últimamente lo inunda todo.