El parque Marià Villangómez en una imagen de archivo. | ARCHIVO

Los concejales del PP en el Ayuntamiento de Vila criticaron ayer la situación de «abandono» en que, en su opinión, se encuentra la zona de Platja d’en Bossa, donde denunciaron distintas quejas de los vecinos como la suciedad, la falta de seguridad, la iluminación, las obras pendientes en calles como la Avenida Pedro Matutes Noguera y el «pésimo» mantenimiento de los jardines.

«El barrio está hecho unos zorros», según el concejal Jacobo Varela, que reprochó al equipo de gobierno que no se reúna con los vecinos, una acusación desmentida tajantemente por la concejala Claudia Cotaina, que aseguró que mantiene encuentros periódicos con los vecinos y que «estamos trabajando permanentemente para mejorar el barrio». Caotaina precisó que mantiene reiuniones presenciales con la asociación de vecinos «el primer jueves de cada mes a las 7 de la tarde».

Cas Serres
Sobre el barrio de Cas Serres, la concejala del PP Carmen Domínguez criticó igualmente «el abandono» que sufren los residentes. «El parque Marià Villangómez está destrozado, sin vegetación, y el otro parque también se encuentra en un estado lamentable», señaló.
Por su parte, la concejala Rosa Rubio, que residió durante más de 30 años en la zona, negó que haya un abandono del barrio, sino todo lo contrario: «Cas Serres ha mejorado muchísimo con este equipo de gobierno», dijo la edil, que aseguró que «solo en este mes me he reunido en cuatro ocasiones con con diferentes vecinos. Tenemos un contacto permanente con ellos y saben que los problemas se están solucionando».