Fachada del Parlament Balear.

El pleno del Parlament rechazó este martes crear una comisión de investigación no permanente sobre el transporte aéreo no sanitario ante las irregularidades cometidas por Eliance, la empresa adjudicataria en la ejecución del contrato formalizado en octubre de 2018.

La propuesta de Vox, apoyada por el PP, fue rechazada con los votos en contra de los socios del Pacte y el Grupo Mixto y la abstención de Cs y El PI.

Unidas Podemos y MÉS per Mallorca sí que formalizaron su voto en contra aunque han rehusado intervenir en el transcurso del debate por tratarse de una propuesta de Vox tras la decisión de adoptar un «cordón sanitario» sobre la formación que lidera en Baleares Jorge Campos.

La diputada de Vox Idoia Ribas, quien defendió la propuesta, subrayó que, entre otras irregularidades, la empresa prestó servicio con aviones más antiguos y de menor categoría que los pactados en el contrato y que la Conselleria de Salud tardó casi un año en iniciar el procedimiento sancionador.

Ribas criticó que Salud dilató «todo lo que pudo» el inicio del expediente sancionador de tres millones de euros, «aunque debía haber sido del doble». Según Ribas, así lo hizo hasta que la presión fue «insoportable».

La diputada de Vox criticó, además, la inactividad de la administración y la dejación de funciones de la Conselleria, «que no vigiló el cumplimiento del contrato». Para Ribas, «algo huele mal y lo que se consigue rechazando la comisión es que huela peor después de saber que detrás hay un fondo de inversión con presencia de excargos del PSOE». La diputada afirmó que el Parlament «encubra» al Ejecutivo en ves de controlarlo.

Por su parte, la diputada del PP Maria Tania Marí, quien votó a favor de la moción de Vox, lamentó que la Conselleria permitiera que se pusiera en riesgo la salud de los pacientes y los sanitarios, lo que ha calificado como un «hecho alarmante».

Marí criticó que en vez de defender la prestación del servicio se optó por defender a la empresa.

El portavoz del Grupo Mixto, Josep Castells, coincidió con Vox y con el PP en que el Govern no gestionó correctamente la situación pero ha rechazado los mensajes alarmistas. «Ningún piloto levantaría el vuelo si estuviera en riesgo su vida o la del paciente», según apuntó. Además, Castells criticó que PP y Vox «se pongan divinos» con el cumplimiento del contrato cuando «son los defensores de la eficacia de los servicios».

Para el portavoz del Grupo Mixto a quien hay que pedir responsabilidades es a la empresa, que faltó a la ética, más que pedírselas al Govern que, efectivamente, reacció tarde. Castells aseguró, además, que comparte el relato de los hechos pero ha apuntado que la solución adecuada no es la comisión de investigación.

La diputada del Grupo Socialista Irene Triay, por su parte, defendió que el Govern y la Conselleria ya han dado las explicaciones oportunas y criticó el alarmismo «porque el servicio nunca dejó de prestarse ni estar garantizado».