Quienes decidieron celebrar el Día del Turista dentro de las actividades que se organizaron en Sant Antoni pudieron visitar el jardín Botánico Biotecnológico en el que su propietario, Eduardo Mayol, hizo de anfitrión mostrando las instalaciones. | Toni Planells

Ayer se celebró el Día del Turista. Entre otras actividades se organizó una visita guiada al Botánico Biotecnológico. Allí varios grupo de turistas, separados según sus lenguas, pudieron contemplar los distintos ecosistemas, los innovadores ensayos científicos, vegetación autóctona, amenazada e incluso desaparecida de la isla. Eduardo Mayol, responsable de este espacio, fue el encargado de mostrar las instalaciones al más nutrido de los grupos, el de españoles. Una de las instalaciones que más llamaron la atención a los turistas fue, una vez más, el piano vegetal, un diseño del joven y prestigioso científico Pablo Vidarte, con el que «se demuestra que las plantas reaccionan al estímulo del tacto», tal como explicaba Mayol.

Y es que esta instalación convierte la reacción de las plantas al tacto en energía eléctrica que acaba transformándose en sonido. De esta manera, cada planta entona una nota al ser tocada. Otro de los inventos que Vidarte ensaya en el Botánico Biotecnológico, y que también llamó la atención de los visitantes, es la instalación Bioo, con la que se genera electricidad a partir de plantas y microorganismos. Mayol aprovechó la parada ante el Bioo para explicarle a sus invitados quién es su inventor: un joven un empresario e inventor español que a sus 25 años no solo es CEO del proyecto Bioo sino que también es presidente de Arkyne Technologies. Además, cuenta con nueve premios de prestigio internacional en Londres, Viena, Bucarest, Praga, París, Barcelona, Madrid y Bruselas y ya ha aparecido en la lista Forbes.

También llamó la atención de los visitantes la instalación que reproduce el funcionamiento de la salinera, que tiene partes construidas con maderas de las motas originales de principios del siglo pasado. Quién quiso pudo llevarse un puñado de la sal cosechada. Quien quiso también pudo probar el agua que Mayol consigue directamente de la humedad atmosférica y contemplar como el CO2 de la atmósfera se convierte en abono para las plantas con un biorreactor. Otra parada obligatoria para los grupos de turistas fue en el jardín de Platón, un espacio del biotecnológico inspirado en el que el filóso griego daba las clases a sus alumnos. La visita al Biotecnológico estaba enmarcada, junto a una excursión en barco y la visita a la exposición Ses pageses de Portmany, dentro de las actividades que se organizaron desde Sant Antoni y que culminaron con la muestra de ball pagés de rigor.

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Actividades y ball pagès
Pero el Día del Turista se celebró en todos los municipios de la isla. En Sant Josep, las actividades pasaron por el Parque Natural de ses Salines, donde un nutrido grupo de turistas celebraron su día visitando las aves del parque natural desde el observatorio de Sant Francesc. Allí desde una carpa del Ayuntamiento de Sant Josep se daba la bienvenida y se felicitaba a los turistas mientras dos técnicas del Parque Natural explicaban las características de la fauna y de la historia de este espacio protegido.

En el municipio de Sa Talaia también se organizó una visita a la exposición ‘Temps de brodats’ en Can Jeroni, o a la de artesanía tradicional con concierto en la oficina de información turística de Platja d’en Bossa y, como no, culminó la jornada con una ballada pagesa. Vila invitó a sus turistas a una visita guiada a Dalt Vila, así como a un taller de esparto y microconciertos de piano en ses Figueretes. La invitación por parte de Santa Eulària consistió en una jornada de puertas abiertas en el Museu Etnogràfic d’Eivissa, una excursión guiada por la ruta del río, un paseo con el minitren por Cala Llonga o en barco por Es Canar. También se culminó el día del turista en la Villa del Río con una ballada pagesa. En Sant Joan, las actividades alrededor del Día del Turista consisten en tres caminatas. La primera se celebró ayer en los alrededores del puerto de Sant Miquel hasta la torre d’es Molar. La segunda tendrá lugar hoy mismo para ir al faro des Moscarter, en Portinatx, y la última tendrá lugar en mañana para visitar la cueva des Culleram en la Cala de Sant Vicent.

Además, el Consell d’Eivissa rindió ayer homenaje a la familia Blackwell, un matrimonio británico que veranea desde hace 25 años en Ibiza, la mayoría de veces en Portinatx.