Durante el verano pasado, uno de cada diez turistas empleó este tipo de servicios sin licencia para sus traslados en la isla. Se trata, según el estudio, de un perfil mayoritariamente extranjero –un 71% de los que optan por usar taxis pirata son turistas internacionales, con una media de edad más joven, y que tiene un presupuesto menor durante su estancia en la isla. Además, alrededor del 63% de los usuarios ya habían visitado la isla en anteriores ocasiones y cuatro de cada cinco viajan en grupo.
Tal y como se desprende de este estudio, los trayectos que reclaman los clientes de los taxistas pirata son similares a los que lleva a cabo el servicio regulado. No obstante, su reputación es peor que la que se obtiene de los clientes que optan por usar el taxi convencional.
Y es que tan solo un 14% de gente encuestada no recomendaría a terceros hacer uso del taxi regulado para moverse por la isla de Ibiza, según apuntó Carlos Mínguez, representante de las Cota Ambiental S.L.P. y GFK, las dos empresas que han llevado a cabo este trabajo de campo.
De hecho, con un 8,6 de promedio, la calidad del vehículo y del servicio en Ibiza roza el sobresaliente. Sin embargo, no se ve con tan buenos ojos el precio y el tiempo de espera, que en la mayoría de las ocasiones cuentan con calificaciones negativas. «Hay una ligera mejoría, ya que un 30% de los consultados dice que lo nota, pero sigue habiendo otro 15% que asegura que existen problemas», detalló Mínguez.
50% de estacionales
En este sentido, explicó que para considerar bueno el tiempo de espera no debería sobrepasar entre los cinco y los siete minutos. Pues bien, en esta ocasión el estudio ha determinado que este verano «habrían hecho falta 45 licencias temporales de taxi más» para conseguir esta media. Un hecho que, según Javier Torrer, corrobora la advertencia que hizo a los ayuntamientos antes de empezar la temporada de verano.
«Este verano solo se han puesto en marcha poco más del 50% de los taxis estacionales y que hayan faltado unos 45, según el estudio, lo constata», declaró el conseller de Transports. Torres explicó, en relación a esto, que «un verano normal los taxis prácticamente se multiplican por dos» y este, aún sin llegar a cifras prepandemia, no ha habido la previsión suficiente para hacer frente al número de turistas que nos han visitado.
Días de descanso en Vila
Cuestionados por si el descanso obligatorio un día a la semana que obligará a llevar a cabo el Ayuntamiento de Vila durante la próxima temporada podría perjudicar aún más esta falta de oferta, el conceller de Transports opinó que «si se para un vehículo y se detecta que hay una falta de servicio, el consistorio tendrá que aumentar aún más el número de licencias».
Por esta razón, destacó la necesidad de «cuantificar muy bien y saber cuántos vehículos se están parando cada día y cómo son los turnos para poder compensarlo de alguna manera».
Reglamento insular
Por otra parte, pese a que el director insular de Transportes explicó que este estudio no guarda relación, tanto él como el conseller Javier Torres avanzaron que su área está intentando avanzar el reglamento insular del taxi, estancado desde su anuncio hace más de un año y medio.
«Ayer [este jueves para el lector] nos reunimos con representantes del sector y aunque estamos pendientes de la orden de carga y descarga del Govern balear, hemos empezado a trabajar», explicó Algaba.
De este modo, añadió, «estamos viendo otras vías para poder aprobar la orden de carga y descarga separándola del asunto de las tarifas e intentar sacarlo adelante mediante el pleno del Consell sin necesidad de pasar por el Govern en los años sucesivos».
1 comentario
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,, y el 95% se va sin pagar una miserable denuncia,,, y lo de 2/3, se contratan de antemano,, me da que este aún no se ha pasado por el aeropuerto en julio y agosto...en fin,,, más de lo mismo, ¡¡ ,, no hay más ciego, que el que no quiere ver..!!