Matadero de Ibiza. | Daniel Espinosa

La Federació Pitiüsa de Races Autóctones (Fepira) informó ayer de su satisfacción por el anuncio del Consell de su intención de poner en funcionamiento una línea de sacrificio de conejo en el matadero ibicenco el próximo año.

«Es una de nuestras reivindicaciones y por fin ha sido escuchada. La puesta en funcionamiento de esta infraestructura nos ayudará, seguro, a conseguir para el conejo ibicenco la declaración de razas autóctonas», señaló Xavier Prats, presidente de la Federació Pitiüsa de Races Autòctones. Actualmente el conejo ibicenco forma parte de una agrupación racial.

El presidente de la federación consideró que esta medida será un gran incentivo para la ganadería en la isla. «La cría del conejo ibicenco es casi testimonial y su permanencia ha sido gracias al autoconsumo familiar. Ahora, se abre un momento fantástico para pensar en su desarrollo», valoró.

Para Fepira, la pervivencia de las razas autóctonas y de los grupos raciales de Ibiza y Formentera pasa por conseguir una mayor producción y una mayor demanda por parte de la sociedad pitiusa. La puesta en funcionamiento de esta línea, abre nuevas expectativas al sector ganadero que sufre una situación crítica.

«No nos cansaremos de repetirlo. Mantener y mejorar nuestras razas es fundamental para la pervivencia de nuestro patrimonio animal y natural. Consumir producto local es cuidar nuestro paisaje, nuestra cultura, nuestra historia», concluyó Prats.