En este espectáculo, al que asistieron alrededor de doscientas personas, se pudo ver a los duendes Triste y Trasto –Marcos Penschow y Víctor García Noguera–, junto con Mirtel –Melanie Penschow– organizando una fiesta en tiempos difíciles, explicando las cosas que se pueden hacer y las que no.
De esta manera, acompañados de una cebra, una piña y dos bailarinas, a base de humor, canciones y, especialmente, haciendo participar al público, los tres protagonistas hicieron las delicias de los niños que estuvieron este sábado en el recinto.
Desde hace tiempo
Ese era el caso de dos amigas de ocho años, Martina y Lucía, quienes llevan siguiendo las peripecias de estos entrañables seres prácticamente desde que nacieron. Este sábado estaban acompañadas por las madres de ambas y por la abuela de Martina, Dolores Brea. Según dijo Lucía, sin embargo, su hermano ya tiene 12 años y no asistió a un evento que se queda algo corto para su edad.
Miriam, de cinco años, también estaba allí con su abuela, Gloria Corral, y afirmó que tenía «muchas ganas» de presenciar la actuación por primera vez en su vida. Lo mismo le sucedía a Alma, de seis años de edad, a quien «hacen reír por la televisión», por lo que estaba deseando contemplar el espectáculo.
Otra niña, Alba, de tres años, estaba en la entrada con sus padres, Toni Costa y Nati Márquez. Ella no sabía qué iba a presenciar, porque era una sorpresa de sus progenitores. Éstos aseguraron que, en su opinión, el espectáculo «está muy bien pensado para los niños» y, al mismo tiempo, a ellos también les servía para airearse.
Quien no asistiera este sábado a la función tiene la opción de acudir a la repetición, este domingo por la tarde, en el mismo lugar, a partir de las 17.00 horas.
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