Imagen de un paso de la virgen procesionando por las estrechas calles de Vila.

Después de dos años que para todos los miembros de las cofradías de las Pitiusas se han hecho muy largos este viernes por la noche dio comienzo oficialmente la Semana Santa 2022.

Lo hizo en el que se conoce como Viernes de Dolores, desde que la tradición cristiana decidiera implantarlo para recordar los sufrimientos de la Madre de Cristo durante estos días, y con una misa que comenzó a las 20.00 horas en la Catedral de Santa María de las Nieves, que sirvió de preludio para la procesión de la Cofradía Nuestra Señora de los Dolores por las angostas calles de Dalt Vila.

Participaron unos 80 cofrades de todo tipo de edades, vestidos con los colores celeste y blanco que se impusieron en el año 1946, incluyendo a María Antonia Serra Cardona, quien a sus 30 años está viviendo sus primeros meses como presidenta de la cofradía. Junto a todos ellos marchó la preciosa imagen titular de la cofradía, Nuestra Señora de los Dolores. Esta talla construida en el taller valenciano de los escultores Román y Salvador en el año 1945 por iniciativa del entonces Consejo Diocesano de Mujeres de Acción Católica, volvió a lucir preciosa mientras la comitiva descendía con solemnidad por las calles de Dalt Vila hasta encontrarse, a la altura de la iglesia de Santo Domingo con la Cofradía del Santísimo Cristo del Cementerio, y continuar hasta el Patio de Armas, desde donde tras interpretar un miserere, regresaron por el mismo camino hasta la Catedral.

Además, este año el trayecto fue un poco más ligero ya que la cofradía estrenaba un nuevo paso para la Dolorosa. Según explicó hace unos días María Antonia Serra Cardona a Periódico de Ibiza y Formentera, se había encargado ya hace dos años en un pequeño pueblo de Zaragoza, aunque hasta este 2022 no ha podido ser colocado.

En este caso es bastante más ligero que el anterior, sobre todo en la zona de los brazos que usan los cofrades para llevar la imagen, tiene color negro con distintos toques en tonos dorados y plateados y en los laterales luce orgulloso los escudos de la Dolorosa.

Santa Eulària

Este Viernes de Dolores también dio comienzo la Semana Santa de Santa Eulària, que cuenta con seis cofradías (Santa Marta, Cristo Atado a la Columna, Cristo Nazareno, Cristo de la Oración, Nuestra Señora de Dolores, Santo Cristo Yacente), además de la Hermandad Nuestra Señora de la Esperanza.

Precisamente, esta última, creada en 2012, fue la primera en procesionar con sus tradicionales colores blancos para su túnica y su capa y verdes para el capirote y el cinturón que también tiene toques dorados.

La marcha partió desde la capilla de Lourdes una vez terminada la misa, que comenzó a las 20.00 horas y durante algo más de cuatro horas recorrió las calles San Lorenzo, San Juan, el paseo de s’Alamera, la plaza de España, la calle San Jaime, la calle Rodríguez de Valcárcel, la calle del Mar, la plaza Isidoro Macabich y las calles San Juan y San Lorenzo para acabar en el mismo templo.

Santo Cristo de la Sangre

Los actos litúrgicos continúan este sábado en Vila con la procesión que del Santo Cristo de la Sangre, propiedad de la Cofradía de Nuestra Señora de la Piedad, que recorrerá las calles de la Marina desde la iglesia de Sant Elm.

Está previsto que salga del templo cuando termine la misa prevista para las 20.00 horas y que esta talla de autor desconocido desfile en compañía de unos 100 cofrades como se lleva haciendo desde 2011 salvo en el paréntesis de estos dos últimos años.