Juan Antonio Ribas, este miércoles en el Bona Nit Pitiuses. | Toni Planells

El Plan de Gestión Natura 2000 elaborado por el Govern balear, por el que se prohibirá o restringirá la caza de determinadas especies en el 33% del coto de Sant Josep, «es un globo sonda que, poco a poco, se irá instaurando en toda Baleares». Así lo aseguró ayer el presidente de la Asociación de Cazadores de Sant Josep, Juan Antonio Ribas Dominguet, en el programa Bona Nit Pitiuses de la Televisió d’Eivissa i Formentera.

Ribas aseguró que los cazadores se sienten «atacados, por lo que tenemos que defender nuestra función». Una función que, entre otras cosas, pasa por cuidar y proteger el entorno rural del municipio. «Hace 25 años había pocos propietarios que se dedicaran a sembrar la tierra», señaló el presidente de los cazadores josepíns, «y nosotros nos    comprometimos a sembrar las tierras de los que nos dejaran cazar en ellas».

Estas actuaciones llevadas a cabo por los cazadores «han cambiado un 100% el paisaje. Tierras que hacía 20 años que se habían dejado de labrar porque no eran rentables, ahora las estamos trabajando nosotros», algo que no sólo beneficia a los cazadores, también «a los propietarios, a los animales que cazamos, a los que no» e incluso a los propios ayuntamientos de la isla, con loo que han firmado convenio para dar caza a las serpientes que desde hace unos años proliferan en la isla. En este sentido, Juan Antonio Ribas recordó que, sólo el año pasado, «cogimos más de 950 serpientes».

Prohibir y fiscalizar

El representante de los cazadores de Sant Josep recalcó que el plan del Govern balear «lo único que hace es prohibir y fiscalizar las cosas que se estaban haciendo» y todo ello sustentado en afirmaciones que no tienen ningún argumento científico. En este sentido, recordó que durante estos últimos 20 años «hemos mantenido una reserva de caza entre el camino a la torre des Savinar y la playa y por voluntad expresa de la asociación». Hace unos años se eliminó esta reserva porque y «en este lugar sigue habiendo los mismos pinos, las mismas tórtolas o gorriones que hace 20 años», por lo que no entiende que se saque ahora una normativa para prohibir cazar estas tres especies cinegéticas

Juan Antonio Ribas hizo referencia a su vez a que el documento elaborado por el Govern justifica la prohibición de la caza de determinadas especies de aves en Sant Josep porque «se ha reducido su población a nivel estatal», cuando en Ibiza «no hay ningún problema con la población de estas aves». De cualquier forma, recordó hay menos presencia en España de tórtolas y perdices porque, directamente, prefieren quedarse en el norte de África. «El norte de África antes era un desierto», indicó, «y desde hace 15 años toda esta zona es regadío, y esto es lo que buscan estos animales, por lo que ya no tienen que emigrar. No es que haya menos población, es que viene menos población», insistió.

El presidente de los cazadores de Sant Josep subrayó a su vez, que, además de la temporada de caza de las distintas especies, su asociación realiza «mucho trabajo» durante todo el año. De hecho, dijo que tenían contratada a una persona a jornada completa que, entre otras cosas, «desde octubre a febrero lo tenemos sembrando las 170 hectáreas que gestionamos en Sant Josep», una siembra que se realiza «en pequeñas parcelas, lo que supone más trabajo todavía». Además, esta misma persona se encarga de dar de comer y beber a los animales, tanto lo que son de caza como los que no.

Ribas insistió en que la caza en Ibiza nunca va a suponer ningún problema para ninguna de las especies susceptibles de ser cazadas en las Pitiusas (el conejo, la perdiz, la becada, el zorzal, la paloma torcaz, la tórtola y la codorniz), algo que si que habría si no hubiera un control cinegético. «Si dejas que la gente salga periódicamente al campo a cazar, cumple los cupos y cumple las vedas, es algo bueno para el campo y para la sociedad». En caso contrario, si se prohibiera la caza, habría plagas de determinados animales a las que al final habría que exterminar mediante la contratación de cazadores profesionales, según explicó el representantes de los cazadores de Sant Josep.