Uno de los puntos negros de la isla.

El departamento de Red Viaria del Consell de Ibiza ha pedido, mediante un escrito, al conseller balear de Movilidad y Vivienda que le habilite para ejecutar obras de mejora de la seguridad de los peatones que emplean el paso de peatones situado en el kilómetro 2,4 de la carretera de Eivissa a Sant Antoni de Portmany.

El vicepresidente primero del Consell d'Eivissa y titular del departamento de Red Viaria, Mariano Juan, ha explicado que «a pesar de ser ésta una vía gestionada por el Govern balear, el Consell de Ibiza ha recogido las peticiones de vecinos y usuarios de este punto comprobando que, efectivamente, la poca señalización y el hecho de que se encuentre en una recta con dos carriles, provoca que los vehículos no siempre respeten la prioridad de los peatones. Por eso, hemos pedido al Govern balear que nos permita resolver este problema histórico de una vez».

En este sentido, el proyecto presentado al Govern balear incluye la instalación de vallas de seguridad, de una nueva señalización más visible y de un semáforo en el paso de peatones ya existente, previa luminaria de aviso. El precio estimado de estas operaciones asciende a 60.000 euros que se ejecutarían del presupuesto de Red Viaria de la institución insular.

Refuerzo en los pasos de peatones

Este refuerzo forma parte de un plan global de mejora en la señalización y la seguridad de aquellos pasos de peatones en los que se ha detectado una especial peligrosidad. De hecho, en la misma carretera, ya petición de los vecinos, se está redactando un proyecto de mejora a la altura del paso de peatones de Can Bonet que también necesitará la previa habilitación del Govern balear para poder ejecutarse; igualmente, ya se ha ejecutado la mejora en el barrio de Can Nadal de Santa Eulària, y se trabaja en mejorar el paso de peatones del centro del pueblo de Jesús.