Desde la patronal de la restauración reiteraron ayer que el turismo de cruceros supone un estímulo importante, según reconoció la presidenta de Pimeef Restauració, Verónica Juan: «El efecto de los cruceros sobre nuestra oferta tiene mucho que ver con el tema de las excursiones y en cómo se planean. También dónde se atraca y de la facilidad que hay a la hora de llegar al centro de la ciudad». «Se nota que hay una repercusión muy grande para los establecimientos que están más cerca de los muelles de atraque o de los que trabajan con excursiones cerradas para los cruceristas», añadió Juan.
Comercio
El presidente de la Asociación de comercio minorista de Pimeef, José Javier Marí, también consideró que el turismo de cruceros «reactiva bastante la ciudad», aunque es probable que en los meses de temporada alta como puedan ser julio y agosto no se perciba tanto ante el elevado flujo de visitantes que ya de por sí se registra en la isla de Ibiza.
«Estos cruceros ayudan mucho a comenzar o a cerrar una temporada de una forma satisfactoria, aunque también depende del tipo de crucero y del crucerista que viaja en él. Habrá que conseguir un equilibrio para que la llegada de estas embarcaciones no suponga un problema pero, por ahora, no he recibido ningún tipo de queja de un asociado asegurando que hay aglomeraciones en las tiendas o por la ciudad», reconoció.
De hecho, Marí explicó que los comerciantes están «muy pendientes y concienciados» sobre la importancia de este mercado, cambiando incluso horarios de sus negocios y llegando a contratar más personal para atender a estos visitantes.
Marí aseguró que los locales del casco histórico de Vila son los que resultan especialmente beneficiados por la llegada de cruceristas. «Se ven beneficiados sobre todo cuando comienza o acaba la temporada, en meses como abril o mayo o septiembre y octubre», insistió.
Transporte
El presidente de la Asociación de Transporte Discrecional de Viajeros de Ibiza y Formentera, Emilio Díaz, también destacó que la llegada de los cruceros provoca «más trabajo y más reservas»para las empresas del sector. Para Díaz, sin duda se trata de «un mercado importantísimo».
Los taxistas de Vila reconocieron ayer ser conscientes de que la llegada de cruceros, más si son dos en un mismo día los que atracan en el puerto, puede causar ciertas dificultades a la hora de atender toda la demanda. Según el colectivo, en una jornada como la del miércoles tampoco ayudará que vayan a librar 35 taxis para acatar la orden decretada por el Ayuntamiento de Ibiza.
«Estos 35 taxis serían de una gran ayuda en una jornada como la de mañana. Si vienen dos cruceros se puede pensar que habrá una demanda de taxis importante, que además se va a concentrar en un punto del municipio», explicaron desde la asociación de taxistas autónomos de Vila.
Este año 2022, el buque ‘Mein Schiff 6’ se convirtió en el primer crucero turístico de la temporada en Ibiza. El pasado abril, los pasajeros de esta nave de casi 300 metros de eslora recalaron en el puerto de Ibiza durante unas ocho horas, reactivando después de la pandemia un sector muy deseado para el pequeño comercio de la isla y la restauración.
2 comentarios
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Señores de la Patronal,vayan ustedes a darse un baño a la putrefacta agua de Cala Tarida y déjenos en paz, a ustedes lo único que les preocupa,es hacer caja,aunque el precio a pagar sea destruir nuestra isla
Ok, recibido el mensaje de la patronal: cuantos más mejor y llenar hasta reventar, nunca es suficiente. De sostenibilidad ("precioso" ver en Botafoc las chimeneas humeantes de estos mastodontes del mar) ya si eso hablamos, cuando la isla quede quemada y arrasada, de no permitir más de un atraque de estos cruceros de manera que no se lleguen a juntar dos, tres o los que haga falta...pena de mentalidad cortoplacista y exclusivamente monetaria de much@s en esta isla. Lo de los cruceros, otro ejemplo más con otros depredadores de recursos naturales. No soy de la liga antiturismo, sé que vivimos de él pero queremos también morir de él? Así vamos bien para conseguirlo