El parking 1 del hospital Can Misses lleno de coches a las 10:30, hora punta.

Desde que el aparcamiento del hospital Can Misses es gratuito han ido surgiendo problemas para estacionar en el recinto por parte de pacientes y familiares como consecuencia de la masificación de vehículos «de fuera» estacionados en el parking.

Una problemática que desde la Gerencia del hospital intentan poner solución conjuntamente con el Servei de Salut de Balears Ib-Salut. «Estamos trabajando en fórmulas que garanticen un espacio destinado para usuarios y familiares dentro del aparcamiento», adelantaron desde el Área de Salud de Ibiza y Formentera a Periódico de Ibiza y Formentera.

Cabe recordar que este aparcamiento alberga diariamente vehículos de personas sin cita o sin ningún enfermo en el hospital que ocupan plazas destinadas a los usuarios del centro.

En este sentido, dichas fuentes explicaron que tienen «voluntad» de mejorar este servicio y que, a través de líneas de trabajo, se comprometen a solucionar una problemática que se está agravando con el tiempo para los pacientes y familiares.

En este sentido, subrayaron que cuando se habilitó la gratuidad del parking se informó a los padres de los alumnos del CEIP Can Misses sobre el uso indebido del aparcamiento, puesto que estas personas, según usuarios del centro hospitalario, utilizaban el parking como estacionamiento. Sin embargo, parece que la llamada de atención no hizo mella en ellos, puesto que, según varios pacientes, los padres de los alumnos de este centro siguen utilizando estos aparcamientos durante el año.

No obstante, mientras que desde la Gerencia señalaron que no tienen constancia de ninguna reclamación por parte de los usuarios, varios pacientes de Can Misses subrayaron en su momento que recogieron firmas para, entre otras cuestiones, solucionar el problema existente en el aparcamiento de Can Misses.

Falta de control

«La falta de control del uso del parking de Can Misses es cada vez mayor», destacó Marc Ignacio Stone, un paciente del hospital que acababa de someterse a una revisión.

Mientras este paciente intentaba abandonar el estacionamiento, Iván Rivera llevaba 10 minutos recorriendo el recinto sin suerte.

Este es el panorama habitual en las horas punta dentro del recinto sanitario. «Es una odisea encontrar una plaza, nos tiramos 20 minutos dando vueltas esperando a que alguien se marche», puntualizó. Además, según este usuario, hay vehículos aparcados más allá de los espacios delimitados para ello o gente que sale del aparcamiento de Can Misses y se dirige a otra zona dejando el hospital a sus espaldas.

Sin ir más lejos, Marc Ignacio tuvo que acudir de Urgencias a Can Misses y le «costó la vida aparcar». Asimismo, la paciente Mayte Martínez, que acababa de someterse a una sesión de radioterapia, subrayó que hay más vehículos de fuera del hospital que de usuarios.

Coches que ocupan dos plazas

«Hay coches aquí desde hace días. También hay decenas de vehículos mal estacionados que ocupan dos plazas para que ningún conductor pueda ocasionar algún desperfecto en su auto», subrayó el acompañante de Mayte mientras señalaba un coche gris metalizado que contenía un aviso de uso indebido en el parabrisas.

En este sentido, desde la cabina de información habilitada en el parking explicaron a este medio que ellos mismos hacen un control y un seguimiento del aparcamiento cada día. «Hacemos un tanteo todos los días a las 11.30 horas, a las 8:30 horas y a las 4: 30 horas. Si no fuera por este control, todo sería un caos», señalaron.

Cabe destacar que el hospital, que cuenta con cuatro estacionamientos, tiene un aforo de más de 500 plazas, siendo el parking uno el que tiene más capacidad con más de 300 plazas», explicó una de las trabajadoras. En esta línea, señaló que si la matrícula no corresponde a nadie del hospital se hace un seguimiento del vehículo y si no aparece el propietario, se llama a la grúa para retirar el coche. «Se han llegado a retirar dos coches al mes», puntualizó.

Asimismo apuntó que la entrada de vehículos de fuera es muy difícil de controlar, puesto que la solución es muy complicada. Se cuestionó: «¿Qué hacemos? ¿Bajamos la barrera? ¿Habilitamos un ticket de parking para que los sanitarios lo validen?».

Sin duda, la situación del parking de Can Misses es una problemática complicada que necesita una solución definitiva en beneficio de los pacientes y familiares de los enfermos. Muy bien lo saben tanto Iván Ribera como José Riera. Ambos son pacientes de Can Misses y los dos acuden al centro de forma periódica.

En el caso de Iván por las revisiones médicas de su hijo y en el caso de José Riera por las sesiones de rehabilitación que tiene que realizar tras su caída y posterior rotura de brazo.   

«Hay una enorme falta de educación cívica a la hora de estacionar», apuntó este hombre tras la última sesión. Asimismo, adelantó que los problemas empezarán cuando comience el curso escolar. «La gente deja los coches aquí sin ningún tipo de apuro. Cuando vengo a las 9:00 horas no tengo problemas a la hora de encontrar plaza, pero como venga a las    doce del mediodía doy decenas de vueltas como todo el mundo», apuntó. Señaló que más de una vez ha tenido que estacionar fuera del parking del hospital.

«No hay derecho. Aquí no hacen falta más plazas sino un control más efectivo de los vehículos que acceden al recinto», puntualizó José Riera.