Un mural interactivo para hacer sonreír a los niños pequeños hecho por Hosh. | Daniel Espinosa

El artista urbano Hosh sigue llenando de arte el municipio de Sant Josep en colaboración con la concejalía de Educación, Participación y Patrimonio que dirige Ángeles Marí.

En esta ocasión el impulsor junto al consistorio del Medusa Art Festival que ya cumple su tercera edición decorando distintas paredes de centros educativos ha decidido dar un paso más creando un mural interactivo junto al herrero Manuel Jesús Pérez en la escoleta Es Vedranell de Sant Josep.

Arriba, Hosh, autor del mural.Foto: Daniel Espinosa.

Está situado en el interior del centro, en un sitio estratégico para que sea contemplado por los padres y madres que dejan a sus hijos y lo que es más importante, en un lugar ideal para que los pequeños estudiantes puedan disfrutarlo en su día a día. «Desde hace tiempo llevo tiempo con la idea de dar una vuelta a los murales tradicionales, añadiéndoles luces led, sonidos y hasta canastas reales, y ahora, aprovechando que soy padre de un niño de cuatro años, pensé que tal vez sería una buena idea aprovechar el Medusa Art Festival para crear uno con elementos interactivos que atraigan la atención de los más pequeños de la familia», aseguró ayer Hosh a Periódico de Ibiza y Formentera.

Resultado espectacular

Para ello se puso en contacto con Manuel Jesús Pérez, porque siempre «aporta soluciones» a todas sus propuestas, y el resultado final es espectacular.

Sobre las letras azules sobre fondo amarillo de inspiración pop art y el tren en el que viajan distintos animales como un león marino rosa, un pájaro o un gato con gafas de sol que ha dibujado el artista ibicenco se han añadido una campana que los pequeños estudiantes pueden hacer sonar, unas ruedas muy coloridas de distintos tamaños que se hacen girar, distintas puertas correderas de las que salen simpáticos personajes tras tirar de ellas con asas y cuerdas y hasta una pequeña ventana con bisagra de la que aparece una tortuga.

Niños y profesores jugando con el mural interactivo. Foto: Daniel Espinosa

Según Hosh, «la intención era crear algo novedoso que no hubiera en la isla», pero ha conseguido mucho más. El mural se ha convertido en muy poco tiempo en un referente de esta escoleta, un lugar muy valorado por toda la comunidad educativa y lo que es aún más positivo, «un punto de encuentro en el que los alumnos y los profesores se juntan para jugar, contarse cuentos e incluso interpretar canciones en comunidad».