Imagen de archivo de los Bomberos de Ibiza. | Archivo

El fuerte hedor presagiaba una desgracia. Una dotación de bomberos realizó a primera hora de este martes la apertura de una vivienda en cuyo interior se localizó el cuerpo sin vida del hombre que residía en la misma.

El servicio de los bomberos fue requerido por la Policía Nacional después de que vecinos del inmueble alertasen del fuerte olor que salía de la vivienda ubicada en un primer piso del número 16 de la avenida Abel Matutes Juan.

A la espera de los resultados de la autopsia, todo apunta a que la muerte del hombre de 64 años se produjo varios días atrás y el calor de las últimas jornadas también pudo acelerar la descomposición. En principio, todo apunta a una muerte natural.