Una turista a las puertas de un hotel en Ibiza. | Irene Arango

La selección de proyectos financiados con la ecotasa en 2023 no cuenta con la aprobación del sector hotelero, que si bien se declara conforme con la mayoría de inversiones previstas, critica que forma especial que se destine parte de la recaudación a actuaciones relacionadas con el acceso a la vivienda.
Así lo explicó ayer la vicepresidenta ejecutiva de la Federación Empresarial Hotelera de Mallorca (FEHM) María José Aguiló, quien manifestó la disconformidad de la entidad con la inclusión de proyectos de vivienda con cargo al Impuesto de Turismo Sostenible (ITS).

Entre las inversiones aprobadas figuran 13,1 millones de euros para la promoción de 53 viviendas de protección pública y 15 millones para el aval de hipotecas para la compra de inmuebles de hasta 270.000 euros.

De esta forma, y a pesar de que desde la Federación comparten la necesidad de plantear soluciones a la escasez de inmuebles, consideran que éstas «deben ser financiadas desde el presupuesto general de la CAIB y sumarlo a otras acciones como el control de la vivienda ilegal que se comercializa en alquiler turístico», ya que «liberarían parque habitacional».

En ese sentido, Aguiló recalca que la FEHM sí apoya los otros proyectos incluidos «correctamente» en la lista de 27 aprobada el pasado viernes por la Comisión de Impulso al Turismo Sostenible y que se relacionaban con «ciclo del agua, movilidad sostenibles, mundo agrícola, diversificación económica e innovación». Unas actuaciones que los hoteleros sí consideran «necesarias para la sostenibilidad integral de las Islas».

Asimismo, afirma que la selección de proyectos debería realizarse con una mecánica «más participativa» y no mediante una aprobación formal «de una preselección» llevada a cabo por el Govern «de forma unilateral». También critica que el listado debe votarse en bloque y no proyecto a proyecto.
Por otra parte, el sector de la vivienda vacacional tampoco está conforme con la selección de proyectos. «La ecotasa se aprobó como un impuesto para pagar las externalidades negativas del turismo y no ha de servir para cualquier idea que tenga el Govern en cada momento: queremos que se destine a la finalidad para la cual nació», reivindica la gerente de la Asociación de Viviendas de Alquiler Turístico de Balears (Habtur), Maria Gibert.