La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Baleares celebra el próximo lunes, a las 10.00 horas, la vista previa al juicio contra seis hombres por robar con violencia en una joyería, dos locales y un bar-joyería en Ibiza, en un restaurante en Formentera, en un concesionario y una cafetería en Palma, en una cafetería en Andratx y en un establecimiento en Calvià. Fiscalía pide para todos ellos penas que suman hasta 53 años de cárcel.

El Ministerio Público señala en su escrito que, el 12 de abril de 2015, dos de los acusados robaron en una joyería de Ibiza, rompiendo el bombín de la puerta, arrancando la caja de alarma, cortando la persiana metálica de seguridad con un soplete y rompiendo las vitrinas de cristal para llevarse joyas valoradas en 500.000 euros.

Además, intentaron abrir la caja fuerte, llegando a hacerle un orificio de ocho centímetros, pero finalmente desistieron, dejándola en ese estado en la joyería.
Posteriormente, el 10 de julio de 2015, uno de los procesados entró en un restaurante de Formentera, arrancando la cerradura de la puerta, y robó el dinero de la caja fuerte, usando un sistema de corte por calor. Asimismo, cogió el dinero de las cajas registradoras y rompió el sistema de alarma y dos ordenadores.

Diez días más tarde, el 20 de julio de 2015, dos de los acusados, junto con otra persona que se encuentra requisitoriada, entraron en un local de copas en Ibiza, en el que rompieron los bombines de varias puertas, para romper tres cajas fuertes, de las que se llevaron 108.500 euros y un reloj y un anillo valorados en 25.000 euros.

El día 2 de agosto de 2015, tres de los investigados realizaron un robo en un local de Playa d'en Bossa de Sant Josep, en Ibiza, rompiendo el candado y el bombín de la puerta principal y abriendo la verja del hotel que se encuentra pegado al establecimiento. Una vez dentro, accedieron a la caja fuerte con una palanca y se llevaron 24.000 euros.

Más tarde, el 7 de agosto de 2015, cinco de los encausados entraron a un concesionario de Palma y se llevaron uno de los vehículos, el cual tenía las llaves en su interior.

Tres días después, el 10 de agosto de 2015, uno de los acusados perpetró u robo en un bar y joyería de Ibiza, rompiendo la puerta metálica trasera y las vitrinas de cristal, y llevándose una caja registradora con 150 euros, 1.250 euros de la cocina y joyas por valor de 60.000 euros.

En Palma, cinco de los imputados rompieron la puerta de emergencia de una cafetería del centro de la ciudad y se llevaron 67.000 euros, tres cajas fuertes pequeñas y 23 llaves de apertura de otros establecimientos.

Haciendo uso de estas llaves, los cinco acusados, el día 24 de agosto de 2015, irrumpieron en una cafetería del Port d'Andratx arrancando una lama de madera de una de las ventanas del local, para abrir con dichas llaves dos cajas fuertes, además de llevarse otra caja fuerte que arrancaron de la pared y romper las alarmas del local.

Por último, el mismo día, 24 de agosto de 2015, los cinco procesados accedieron de forma ilícita a un establecimiento de Portals Nous de Calvià, donde abrieron con las mencionadas llaves dos cajas fuertes que contenían 34.000 euros.

Además, tras ser sorprendidos por el guardia de seguridad, uno de los acusados arrojó spray irritante a los ojos del vigilante, causándole una ceguera momentánea que les permitió huir del local.
Así, la Fiscalía considera los hechos constitutivos de un delito continuado de robo con fuerza en las cosas, agravado por la pertenencia a grupo criminal, así como un delito de robo con violencia con uso de instrumento peligroso y un delito de falsificación de documento público.

En total, el Ministerio Público pide para los acusados la suma de 53 años y seis meses de cárcel y 1,43 millones de euros de indemnización por responsabilidad civil.

Para uno de los acusados, se interesa que la pena interpuesta de cinco años se sustituya por la expulsión del territorio nacional durante diez años.