El compromiso personal como claves de la economía sostenible

Albert Bosch Riera (Cataluña, 1966) es un deportista, emprendedor y escritor que ha participado en alrededor de un centenar de aventuras deportivas, entre las que destacan la expedición al polo sur, el proyecto ‘Siete Cumbres’ y la participación en nueve Rally Dakar. Es experto en Liderazgo y promotor del concepto ‘liderazgo circular’ inspirado en el concepto de economía sostenible. Para poder comprender en qué consiste el concepto de liderazgo circular, Bosch explicó que hay que entender primero tres ejes básicos: liderazgo personal, liderazgo organizacional y liderazgo sostenible. A través de su experiencia de vida, fue desgranando los conceptos que él considera «clave para el futuro de cada persona, de cada organización y de la sociedad y el planeta en general».

La economía circular es uno de los factores esenciales en la historia de la humanidad para poder avanzar hacia un futuro más o menos caudal. En cuanto al futuro, la idea principal de Bosch fue que si queremos mejorar a largo plazo debemos asegurar entrar en un progreso de economía circular. «Para hablar de sostenibilidad tenemos que hablar de personas», comenzó Bosch. El liderazgo «es hacer que las cosas pasen». Para ello tiene que haber primero una misión para después elaborar una estrategia de acción, que luego se debe contar y hacer que las cosas pasen. Relacionándolo con la isla indicó que «no existirá en Ibiza un turismo sostenible si las organizaciones no se comprometen con el turismo sostenible, pero no existirán organizaciones comprometidas si no hay personas que se preocupen por éll. Por lo tanto, todo empieza en la persona y como somos seres gregarios luego lo compartimos con los demás». Esto siempre generará un impacto, que puede ser positivo o negativo, y cuando nos agrupamos es mucho más grande, por lo tanto de este impacto tenemos que hacernos responsables, y esto es la sostenibilidad o el liderazgo sostenible, según explicó.

Bosch relató sus múltiples aventuras. Así, el primer viaje que ha relatado en la conferencia de este miércoles comenzó en la Antárida, que Bosch cruzó en 2011 desde la costa al polo sur caminando sin asistencia y sin ningún tipo de energía externa. Según relató, tardó 67 días en terminar la expedición de 1.200 kilómetros en condiciones extremas de viento, aridez y frío. Empezó con un compañero y al segundo día quedaron confinados en su tienda de campaña por una fuerte racha de viento que duró 15 días y les impedía incluso ser rescatados. Después de este confinamiento su compañero decidió marchar y Albert Bosch se quedó para completar la travesía en solitario en 48 días. Esto, según expuso, es un claro ejemplo de liderazgo personal, porque «antes de liderar organizaciones tenemos que saber autoliderarnos», explicó. Esto significa controlar nuestros hábitos, nuestras actitudes, autoconocernos, controlar nuestra inteligencia emocional, autoliderarnos, autocontrolarnos, tener clara nuestra visión, nuestro propósito, nuestros valores, según expresó.

Como conclusión puso sobre la mesa cinco parámetros que se pueden aplicar al turismo de sostenibilidad: gestión de los límites; la unidad de medida, es decir, cómo generamos valor; y la implementación en las organizaciones, que es hacer una comunicación efectiva, ser transparentes, poner insentivos a los trabajadores.