El edificio en su conjunto está que se cae a trozos por el nulo mantenimiento de los ocho últimos años. | Irene Arango

El centro de formación de sa Blanca Dona de Ibiza ha sido cerrado de forma cautelar por el Govern después de que el Ejecutivo autonómico detectara deficiencias graves en la infraestructura. Una decisión tomada a partir de un informe valoración técnica iniciado en septiembre en el que apunta que el edificio se está moviendo debido al mal estado de la estructura y de los pilares que lo sostienen, según ha explicado este miércoles Alejandro Sáenz de San Pedro, conseller balear de Empresa, Empleo y Energía. «Estoy muy sorprendido», afirmó el conseller, quien aseguró que tras la visita de inspección se han dado cuenta de que ha habido una «falta de mantenimiento histórica» de este centro. Cuando empezaron a analizar los inmuebles y ponerse en contacto con los equipos docentes de los distintos centros de Ibiza llegaron quejas de desperfectos y, a partir de ahí, se solicitó un informe en el que se indicó que el edificio se está moviendo.

El colapso

El techo de la cocina que usan los estudiantes de hostelería comenzó a colapsar cuando la estructura de yeso cedió debido a las filtraciones de agua y el peso de las lámparas. Esto ocurrió en las vacaciones de Semana Santa de este año, por lo que ningún estudiante salió perjudicado y las condiciones permitieron cambiar las lámparas y proseguir los dos meses de clase que le quedaban a algunos alumnos. Pero lo más grave que detalla el informe, según Alejandro Sáenz es la propia estructura del edificio, los pilares y los cimientos. Que no están perjudicados solamente por la calidad de los materiales que se usaron en su construcción hace 45 años sino que la entrada de agua ha ido debilitando cada vez más la estructura. Lo que ha llevado a que el informe recomiende el cierre inmediato de este centro y una posible reforma, que según palabras de Sáenz no van a «valorar ahora» ya que la preocupación principal es la reagrupación de los alumnos y seguir dando continuidad a los programas educativos. En palabras del conseller Alejandro Sáenz, «los daños pueden ser subsanables; casi todo en esta vida lo es, pero habrá que analizar el alcance de los desperfectos».

El problema del agua es que no solo se ha filtrado por el forjado o por la cubierta sino por todos los laterales, lo que ha llevado a la debilitación de la estructura y de los propios materiales, lo que lleva a su vez asociado problemas cada vez más grandes. Además, la calidad del cemento y del hormigón no obedece a los parámetros de seguridad establecidos.

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Reubicación

Fue este martes 12 de diciembre cuando comunicaron los técnicos que la situación era bastante más grave de lo que se veía en un principio y fue cuando tomaron la decisión de clausurar el centro, reubicar a los docentes y a los alumnos para, de momento, velar por la seguridad e integridad física de las personas, según detalló el conseller balear de Empresa.

En total, son 44 alumnos los que están en distintos módulos formativos y quienes han sido trasladados a los centros próximos de sa Blanca Dona e Isidor Macabich, al igual que al personal docente y las oficinas centrales del SOIB (Servicio de Ocupación de las Islas Baleares), que suponen un grupo de unas 10 personas. Sáenz destacó que también han solicitado ayuda a los consellers de Educación para que les «echen una mano a la hora de poderle dar continuidad a todos los procesos formativos». Por el momento, están en diálogo con distintos centros para que en el mes de enero se pueda a empezar con todas las especialidades formativas antes de la temporada. Es preciso recordar que los cursos de los centros de formación no duran un año lectivo y, por eso, muchos alumnos comienzan a principio de año.

El conseller de Empresa, Empleo y Energía expresó su malestar con esta situación: «Tenemos un equipo docente y unos programa de formación fantásticos y un inmueble que se cae. Es triste que un centro de referencia como este en temas tan importante para nuestra economía como es el sector turismo que tenga que estar cerrado por falta de mantenimiento brutal desde hace muchos años». Asimismo precisó que le llama «mucho la atención» el estado del edificio viniendo de «un gobierno de izquierdas que ha gobernado tanto tiempo hablando de la formación y la educación pública de calidad», concluyó.