Imagen de archivo del centro de salud de Sant Antoni.

La pasada madrugada del 5 de enero, el taxista J.T.R. sufrió una agresión en su taxi de Sant Antoni. Tal como relata esta persona a Periódico de Ibiza y Formentera, «fue en un viaje que hice desde el centro de Sant Antoni hasta la bahía, al lado del hotel Playa Bella». Lo que parecía ser un viaje más del taxista con «dos jóvenes de unos veintitantos años que, tal como me dijeron, iban a hacer un botellón en la playa», se torció a la hora de pagar la carrera. «Al llegar, el chico de delante me preguntó si podían pagar con tarjeta y, cuando fui a sacar el datáfono para cobrar el chico del asiento de atrás empezó a golpearme con una piedra en la cabeza», explica el taxista, quien añade que «enseguida se fueron corriendo; yo creo que el chico de delante no se lo esperaba y salió corriendo enseguida. No me robaron nada».

Con la cabeza ensangrentada y el susto en el cuerpo, J.T.R. acabó la noche en el centro de salud de Sant Antoni, donde le pusieron 11 grapas en la cabeza. «Los chicos no parecía que fueran borrachos ni drogados. Además, el de delante parecía simpático; me estuvo preguntando qué tal las fiestas y contando que se iban a hacer un botellón», recuerda el taxista que, con 40 años de experiencia al volante, reconoce que «nunca me había pasado algo parecido».

El taxista ha denunciado los hechos ante la Guardia Civil.