Un momento de la charla impartida ayer por la tarde. | Irene Arango

El fisoterapeuta Paco García proporcionó en Sant Jordi una charla-taller enfocada en desterrar los mitos del cáncer de mama, así como los diferentes tratamientos y sus efectos secundarios, como pueden ser la fatiga, el dolor, o neuropatías. García impartió la charla junto a Ismael Sureda Gómez, el entrenador que dirige las sesiones de ejercicio en el centro Fisioactividad.

El mito más relevante relacionado entre el deporte y el cáncer es que no se haga esfuerzo con los brazos afectados. Sin embargo, según explica Paco García, «ahora se sabe a ciencia cierta que el ejercicio de fuerza con moderación ayuda a prevenir la aparición del linfedema», que es la hinchazón del brazo que es un efecto secundario por las cirugías de las pacientes de cáncer de mama. También se sabe que «la masa muscular se va a comer las glucosas que tanto le gusta a las células» y para impedir que se alimenten así estas células es oportuno conseguir que «el músculo se lo arrebate».

El entrenamiento de fuerza es muy importante, pues tiene unos efectos positivos a nivel general del organismo y actúa contra los diferentes síntomas de la paciente. Además los tratamientos se enmarcan en diferentes fases, y el ejercicio puede ayudar a la paciente a ir preparando su cuerpo para la siguiente.

Otro mito explicado por este profesional es el no mover el brazo si hay una cicatriz, que suele doler cuando se estira, y en realidad «lo que hay que hacer es moverlo para que se convierta otra vez en piel elástica dentro de sus limitaciones», es decir, que no se hagan adherencias.

Los tratamientos hormonales también hacen efecto sobre los estrógenos, que es otro elemento que no se debe descuidar, pues se entrena y mejora a través de la fuerza.

Beneficios del ejercicio

Uno de los síntomas secundarios más notables es la fatiga. Por eso, «cuanto más preparado físicamente estés, mejor vas a sobrellevar esa fatiga que se te va a ir acumulando».

La quimioterapia tiene un efecto muy habitual en el bombeo del corazón, entonces cuanto mejor lo tengas menos lo notarás.

Cada tratamiento es distinto, pero este fisioterapeuta hace hincapié en que el ejercicio es «fundamental pero en particular para el de mama por la extirpación de ganglios». Es esencial hacer tanto ejercicio de cardio como de fuerza, pero Paco García recomienda comenzar por el segundo: «Yo empezaría por el de fuerza porque cuando tú ejercitas el músculo al crecer genera mitocondrias, que es donde se metaboliza el oxígeno muscular y cuando entrenamos el cardio mejoramos el consumo de oxígeno. Pero si no tienes mitocondrias, no puedes mejorarlo,. Entonces, si no tienes la capacidad de estar haciendo un ejercicio cardiovascular por lo menos dedícale 10 o 15 minutos a un entrenamiento de fuerza», según concluyó Paco García.