El puerto de Sant Antoni. | Irene Arango

La Asociación de Comerciantes de Sant Antoni reclamó ayer que, bajo ningún concepto, el tráfico de mercancías regrese a la bahía. Su presidente Joan Ribas reconoció la «sorpresa» que les ha producido que justo ahora vuelva a hablarse de la posibilidad de reabrir el puerto al tráfico comercial después de que la naviera Baleària haya manifestado sus intenciones de operar en la bahía este próximo verano con una nave de 86 metros de eslora. «Pensábamos que ya no volvería a existir este tráfico», comentó Ribas.

El presidente se refirió a la valoración del presidente del Consell, Vicent Marí, quien también este viernes expresó su «sorpresa» y «malestar»tras conocer las intenciones de Baleària. Según dijo, el proceder de la naviera «no es la manera de actuar» puesto que deberían haber informado al Consell d’Eivissa y al Ayuntamiento de Sant Antoni sobre sus intenciones. Marí criticó además que la empresa comenzara a vender los billetes de la ruta con Sant Antoni, aunque después rectificara y sólo ofreciera trayectos entre Ibiza y Dénia o Palma.

«No sé si es una estrategia comercial porque Baleària comenzó antes a vender los billetes, pero que lo haga bien», exigió Ribas.

Desde la patronal explicaron que, desde el inicio, estuvieron a favor de limitar el tráfico comercial. En caso de reabrirse el puerto, reclamaron ayer que «no vuelvan a venir vehículos con mercancías». Los comerciantes también criticaron que la naviera sólo ha solicitado operar en el puerto durante los meses de temporada alta, cuando lo mejor sería extender esta posibilidad durante más tiempo para ayudar a desestacionalizar, si es que logran el permiso de Ports Ib.

La asociación hotelera de Sant Antoni y bahía recordó ayer que hace unos años, cuando entró en vigor la moratoria en el puerto de la localidad, la mayoría de sus miembros se mostró a favor de que no llegaran los ferris a la localidad, una postura trasladada al Ayuntamiento y al Govern. La patronal pudo comprobar cómo la llegada de turistas al municipio y a la bahía de Sant Josep «ha sido igual de positiva», con datos de ocupación satisfactorios, por lo que «no vemos motivo para volver a reanudar la llegada de estos barcos a Sant Antoni».

«Es una lástima que al final estás decisiones no se puedan consensuar entre todos los agente implicados y sea la voluntad de la mayoría la que prime», concluyeron desde la asociación.

La plataforma Salvem sa Badia consideró ayer que la postura del presidente Vicent Marí «le honra porque aporta coherencia al sinsentido que se ha producido» en relación a los planes de Baleària.

Para Salvem sa Badia, las palabras de Vicent Marí «introducen una nueva derivada que hasta ahora no había estado presente en el debate y que va más allá de la limitación de los metros de eslora o las consecuencias ambientales y de seguridad que pueda implicar el regreso de rutas comerciales con ferris al puerto de Sant Antoni». En concreto, la plataforma se refirió al trabajo que desarrolla el Consell para sacar adelante una iniciativa legislativa que regule el desembarco de vehículos en determinados momentos del año, «algo totalmente contradictorio con el establecimiento de nuevas líneas».

El colectivo consideró que Ports IB y el Ayuntamiento de Sant Antoni han vuelto a avivar el debate sobre el regreso de ferris, aunque las palabras del presidente del Consell son «la primera muestra de coherencia registrada hasta el momento por parte de un representante institucional de peso».

También recordó que el pasado mes exigieron al Consistorio y al ente portuario que aclaren cuáles son los supuestos beneficios que barajan para justificar la reactivación del tráfico comercial en Portmany. La plataforma criticó que la naviera ha elegido la «peor solución posible» para tratar de volver a operar en el puerto de Sant Antoni puesto que el buque elegido sobrepasa en un 32% las dimensiones máximas permitidas hasta la fecha (65 metros de eslora) y se trata de un buque «altamente contaminante».