240 personas han sido detenidas e investigadas por cada 1.000 infracciones penales y se han esclarecido alrededor de cuatro de cada diez casos. | Archivo

Baleares ha registrado en 2023 una tasa de criminalidad de 65,6 delitos por cada 1.000 habitantes, una cifra por debajo de los valores medios registrados antes de la pandemia, según el balance anual de criminalidad del Ministerio del Interior.

Así, en 2020 y 2021 la criminalidad se redujo a tasas de 51 y 52 delitos por cada 1.000 habitantes, respectivamente, por el efecto de los confinamientos y de las restricciones de movilidad, mientras que el 2019 esta tasa se elevó hasta los 67,6 delitos por cada 1.000 habitantes.

El balance constata que en el archipiélago se han contabilizado de enero a diciembre de 2023 un total de 78.531 infracciones penales y que la resolución ha superado los niveles del año anterior.

En concreto, 240 personas han sido detenidas e investigadas por cada 1.000 infracciones penales y se han esclarecido alrededor de cuatro de cada diez casos. El volumen de las infracciones penales, en general, en las Islas ha aumentado un 3,4%, mientras que en 2022 este aumento superó el 27% respecto al año anterior.

Por tipología, los hurtos han sido el delito más común, aunque se ha reducido su incidencia, con 23.009 casos en 2023 frente a los 24.460 registrados el año anterior. Asimismo, han bajado un 8,7% los robos con fuerza en domicilios, establecimientos y otras instalaciones, mientras que se han contabilizado 52 sustracciones en explotaciones agrícolas o ganadería, 12 menos que en 2022.

En cuanto al resto de tipologías, en 2023 se han producido en Baleares ocho homicidios --cinco más que en 2022--, y han crecido los delitos relacionados con el tráfico de drogas --un 24%--, contra la libertad sexual --cerca de un 16%-- y las sustracciones en vehículos --un 16,7%--.

Respecto a la criminalidad relacionada con los medios informáticos, las denuncias por estafa han crecido un 36,8%, mientras que el resto de los ciberdelitos han bajado, en conjunto, un 6,6%.

Ibiza, la tasa más alta

Por islas, la tasa de criminalidad acumulada de los últimos 12 meses es de 65,6 delitos o faltas por cada 1.000 habitantes en Mallorca, de 78 en Ibiza, de 46,7 en Menorca y de 58,4 en Formentera.
En Palma la tasa de criminalidad ha sido de 82,4 casos por cada 1.000 habitantes y, en conjunto, el número de infracciones se ha reducido un 0,6%.

En cuanto al resto de municipios de más de 20.000 habitantes, el número de delitos ha bajado en Calvià --un 7,8%--, Sant Josep -un 2,4%- y Santa Eulària des Riu -un 3,1%-, mientras en Sant Antoni el porcentaje con respecto a 2022 no ha variado. En el caso de Vila, las infracciones penales en general han experimentado un aumento del 5,1%.

El inicio de este año

Sobre el arranque de año cabe destacar que durante este primer trimestre de 2024 se han disparado las infracciones penales en todos los municipios de más de 20.000 habitantes de la isla de Ibiza, registrándose el aumento más destacado en Sant Antoni con un incremento del 22,2% respecto a los primeros tres meses del año pasado. Vila se sitúa en segunda posición con un incremento del 21,8% en el total de infracciones penales, mientras que en Sant Josep el crecimiento ha sido del 12,9% en el primer trimestre de este ejercicio frente al mismo periodo de 2023 y la Villa del Río ha experimentado el crecimiento más discreto con un aumento del 5,7% en las infracciones penales. Por lo general, la principal infracción penal que se produce en Ibiza son los hurtos (432 contabilizados de enero hasta ahora, marzo) y los robos con fuerza en domicilio, que han pasado de los 38 registrados en el primer trimestre del año pasado a los 61 contabilizados hasta ahora a la espera del cierre de este mes de marzo.