La plataforma ‘Ya es hora de soluciones para el vertedero’ congregó ayer a un buen número de ciudadanos interesados en conocer el trabajo realizado desde que se dio a conocer, el pasado mes de septiembre. Surgida gracias a la unión de vecinos de Roca Llisa o Can Furnet y de colectivos como Jesús en Transición, los integrantes reclamaron que se deje de politizar la realidad del vertedero, con constantes enfrentamientos entre los diferentes partidos políticos, impulsando entre todos una acción común para acabar con los problemas que genera la instalación.
Desde la plataforma, el presidente Daniel de Busturia señaló que su intención ayer era reunir a los vecinos afectados de una manera u otra, valorando también las acciones a realizar en un futuro inmediato que deben centrarse en las soluciones a plantear cuando el vertedero agote su capacidad.
«Hemos querido informar a los vecinos sobre lo que hemos hecho desde la constitución de la plataforma y las conversaciones que hemos ido teniendo con el Consell, los ayuntamientos y todas las fuerzas políticas para tratar de hacer de este asunto una especie de pacto insular, compartiendo una voluntad de solución», declaró.
Según recordó el presidente, la primera medida relevante alcanzada en la plataforma fue concluir que los estudios realizados hasta la fecha estaban incompletos teniendo en cuenta la importancia que tiene la planificación futura de la gestión de residuos en Ibiza. «El Consell, viendo la petición que hicimos, iba a encargar un estudio más a fondo sobre las soluciones que pueda haber en el vertedero pensando en el futuro», insistió.
Para resaltar la relevancia de la plataforma, desde la entidad destacaron ayer que vecinos de Roca Llisa forman parte del colectivo y sólo en este lugar se contabilizan unas 1.500 viviendas. También Can Furnet, donde existen unas 2.000 casas. «Nos estamos dirigiendo a un colectivo muy amplio», recordaron.
De Busturia explicó además que algunas viviendas se encuentran a 150 metros del vertedero, por lo que el grado de afectación es muy elevado. También precisó que han comenzado a realizarse algunas de las mejoras anunciadas por el Consell como las proyectadas en la pantalla vegetal del vertedero, «aunque las consideramos todavía insuficientes».
En relación al problema de los olores, la plataforma reconoció la dificultad de las soluciones técnicas. Según sus impresiones, estarían ya adoptándose medidas. «No es que las casas se construyeron cerca del vertedero, es que el vertedero se acercó a las casas porque se ha ido ampliando su espacio», concluyó.
Según explicaron el pasado septiembre, su creación en Ibiza responde a la necesidad de dar con una solución para la gestión de los residuos en Ibiza, comenzando con el vertedero que está causando muchos problemas medioambientales y de salud pública. «Hemos nacido para reivindicar una solución después de muchos años», reiteraron.
Más recientemente, el pasado mes de febrero, afirmaron que un informe del Consell d’Eivissa sobre la futura gestión de residuos era «insuficiente» y, por tanto, no era una buena base para decidir sobre esta cuestión. Según explicaron además, no tendría sentido plantear la instalación de una incineradora si no se cumplen los objetivos en la reducción obligatoria de residuos.
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