Imagen de archivo del hospital Can Misses.

Si se sumaran todos los porcentajes de ausencias de citas médicas registradas por el Área de Salud de Ibiza y Formentera en marzo de 2024 se alcanzaría el 36 % de los usuarios de Ibiza con consulta programada perdida, siendo la cifra más alta, casi un 10 %, aquella que refleja la falta de asistencia a las citas con el especialista en consultas externas después de esperar varios meses, en algunos casos, para ser atendido por el facultativo. Unos datos ligeramente reducidos en la pitiusa menor, ya que, según ASEF, las incomparecencias en el Hospital de Formentera supusieron en marzo de este año un 7,4 % del total de las citas pedidas, mientras que en Atención Primaria del Área de Salud llegaron a faltar casi el 6 % de los usuarios que tenían una cita programada de medicina de familia.
Respecto a las citaciones en Pediatría, dichas fuentes señalaron que un 6,12 % de usuarios no se presentaron en los centros sanitarios de la isla y, en relación a las consultas de Enfermería, esta cifra alcanzó casi el 8 % de los usuarios.

Sin aviso previo

Al preguntar al Área de Salud por la pérdida económica que supusieron estas incomparecencias sin aviso previo, desde la entidad explicaron que es muy «complejo» desgranar cuánto dinero se pierde por inasistencia a las citas. Lo que sí destacaron es la importancia de que el paciente advierta con suficiente antelación que no acudirá a la consulta porque, detrás de esta ausencia, está el desplazamiento de los sanitarios, la preparación de las pruebas, las horas de trabajo para los profesionales de Ibiza y todo esto le cuesta dinero a la sanidad pública y, además, perjudica a otros pacientes.

«Además del coste económico, detrás hay un incremento paulatino de la lista de espera, ya que esa persona que no ha comparecido a su cita sin avisar sigue en la lista de espera y ha impedido que otra persona asista imposibilitando que se reduzca el número de pacientes e incrementando de esta manera la demora», apuntaron desde ASEF. Cabe recordar que hace pocos días desde el Col·legi de Metges de Baleares subrayaron que las Islas pierden más de 26 millones al año por «pacientes que dejan tirado al médico». En total, indicaron, cerca de 240.000 personas en Baleares no acuden a la consulta programada.

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Esta cifra económica es el resultado de multiplicar el coste medio de una cita, que es de 123 euros, por el número de usuarios que no se presentaron en el centro sanitario. Hay que señalar, según esta entidad, que el precio de una consulta con el especialista hospitalario oscila entre los 154 euros y los 92 euros de las citas sucesivas, siendo el coste medio estos 123 euros. Al respecto, indicaron que la sanidad pública no es gratuita, sino que se subvenciona a base de impuestos. También puntualizaron que estas cifras de incomparecencia que se siguen dando en 2024 son similares a las del año pasado.

Al extrapolar estos datos de Baleares a Ibiza se observa que en Can Misses había en marzo una lista de espera de consultas externas de más de 6.000 personas. Esto supuso una pérdida económica, durante este periodo de tiempo, de unos 70.000 euros al aplicar ese 10 % de ausencias a las citas médicas con el especialista registrado por ASEF. Hay que señalar que el Portal del Paciente del IbSalut contabilizaba más de 20.000 usuarios en esta lista de espera, pero cerca de 13.000 pacientes tenían demoras de más de 60 días.

Por su parte, desde el Col·legi de Metges de Baleares explicaron que estas pérdidas económicas se producen también en otros países con sistemas de salud públicos similares. Por este motivo recordaron el anuncio emitido por Francia en el que se establece que, a partir de 2025, multará con cinco euros a quienes no acudan a su cita con el médico. No obstante, este organismo duda de que las sanciones sean las mejores medidas «para concienciar a la gente, y prefiere optar por la pedagogía», tal como declaró la ministra de Sanidad, Mónica García.

«El afán no debería ser recaudatorio sino el de concienciar a la gente. Cada vez que alguien falla y no anula es una forma de descuidar y ser irrespetuoso con el sistema. Que sea gratis no es que no cueste nada. Hemos dicho que todo el mundo tiene derecho a ser asistido de forma inmediata y el sistema no va así. No es infinito ni ilimitado», apuntaron. Cabe recordar que, a nivel nacional, estas incomparecencias son también muy elevadas, puesto que anualmente se llegan a perder 11 millones de citas sin contar las consultas con los médicos especialistas.