Imagen tomada la semana pasada de la valla que impide el acceso al camino que lleva a Tagomago.

Imagen tomada la semana pasada de la valla que impide el acceso al camino que lleva a Tagomago.

María José RealEivissa14/10/15 0:00
TW4

El Grup d’Estudis de la Naturalesa (GEN) presentó el pasado viernes una denuncia ante el Consell d’Eivissa al comprobar que existe una valla que impide el paso por el camino de dominio público que lleva del embarcadero hasta el faro del islote de Tagomago. Una persona acudió la semana pasada al islote y comprobó que el acceso a este camino estaba cerrado con una valla de madera que, a su vez, estaba cerrada con un candado. En la valla, tal y como se muestra en la fotografía que acompaña a esta información, se pueden leer dos carteles que dicen ¡Cuidado!, perro peligroso y propiedad privada, acceso prohibido, algo incierto según recordaron desde el GEN ,ya que esta zona es pública y debe permitir el acceso a cualquier persona. En este sentido, en la excursión que organizó el GEN el verano pasado no se impedía el acceso al camino mediante ninguna valla, tal y como recordó el presidente de la organización ecologista, Joan Carles Palerm.

«Intuimos que la valla y los nuevos carteles pueden llevar al menos todo el verano. Ese camino es de dominio público y con el impedimento del paso mediante la valla se impide el acceso libre a una zona que es de todos», explicó Palerm, quien aseguró que, además del dominio público del camino, existe una franja de costa que también es de dominio público. Desde el GEN pusieron en conocimiento de esta situación a la máxima institución insular y exigen a Costas que actúen para impedir que se continúe cortando el paso a «un camino que es de todos».

Cabe recordar que el Ayuntamiento de Santa Eulària solicitó al Govern la declaración de reserva natural de este islote con la intención de proteger sus valores mediomabientales. A esta petición, entidades como Alianza Mar Blava u Oceana hicieron sus aportaciones al documento y sumaron su apoyo a esta iniciativa. En paralelo, el Consistorio de la Villa del Río solicitó a la Demarcación de Costas de Balears la gestión del kiosco de Tagomago para así determinar si tendría un uso cultural, social o directamente ningún uso. Costas no se pronunció en todo el verano, por lo que el establecimiento permaneció cerrado.