Unas goteras procedentes de una fuga de agua de la zona de esterilización, concretamente de la planta de ósmosis y que cayeron a la sala de reanimación del nuevo hospital Can Misses ocasionó anteayer la suspensión de trece intervenciones quirúrgicas programadas.

El gerente del Área de Salud de Eivissa y Formentera, Pep Balanzat, dijo ayer que «la avería está resuelta y se están haciendo controles microbiológicos del hongo aspergillus por seguridad», para evitar el riesgo de infecciones hospitalarias.

La fuga de agua que cayó a la sala de reanimación, el lugar pre y posperatorio de los pacientes, procedía de la planta de osmosis de la esterilización del material quirúrgico que está ubicada en la planta superior a la sala de despertar. Al parecer, durante toda la noche estuvo cayendo agua. «A las ocho de la mañana nos enteramos y se decidió no operar». Las únicas intervenciones realizadas fueron las de Cirugía Mayor Ambulatoria, las que no tienen que pasar por la sala de reanimación. De hecho, la zona está sellada y se están realizando los controles microbiológicos para evitar el contacto con el quirófano. «Hasta que no se tenga seguridad de que la zona está limpia no se utilizará la sala de reanimación», añadió el gerente del Área de Salud.

De momento se ha utilizado una sala de Cirugía Mayor Ambulatoria como sala de despertar y a lo largo del día de ayer volvió a reanudarse la actividad en los quirófanos. «Ayer se usaron las camas de Cirugía Mayor Ambulatoria para reanimación y los quirófanos han funcionado normalmente», explicó.

La fuga del agua se produce en unos momentos en los que el hospital está con un índice de ocupación más elevada. «Estaba previsto que bajaran las temperaturas y el lunes se abrieron más camas», dijo ayer el gerente,. Concretamente en Especialidades Médicas reconvirtieron camas individuales en dobles y en Medicina Interna.

Desde el sindicato CSI-CSIF aseguraron que lo que hay en Can Misses es un problema de infraestructuras, «hay mucho espacio perdido pero no ganamos tantas camas», dijo Teresa Arce, que aludió, además, «a la fuga de agua en quirófano y a los problemas con la situación del despertar».