Nikki Beach, el beach club situado en Santa Eulària, comenzó ayer a su cuarta temporada en la isla con una fiesta que desafió al mal tiempo, la lluvia y las nubes que amenazaron con convertirse en protagonistas. Afortunadamente, no fue así, y los asistentes pudieron disfrutar de una selección de lo que este espacio ofrecerá estos meses estivales, la mejor gastronomía y los mejores cócteles, música y espectáculos de todo tipo, preciosas piscinas, hamacas blancas, cortinas elegantes y tipis en color claro.

Tras la celebración de ayer, Nikki Beach abrirá todos los días desde las 11.00 horas, poniendo al servicio de turistas y residentes su amplio espacio frente al mar, en el que destacará una vez más su exclusivo restaurante con terraza junto a la playa y sus platos inspirados en la gastronomía de todo del mundo. Un restaurante donde este año habrá un nuevo menú que se desarrollará de jueves a sábado en la playa y que incluirá «una variedad de deliciosos platos que incluye desde producción local, sushi y mariscos, pasando por ensaladas de temporada y asados de carne».