O las administraciones ibicencas fueron muy prudentes a la hora de elaborar sus presupuestos para el año 2015 o no supieron en qué gastarse el dinero que recaudaron a lo largo del año. Sólo así se explica que 30,5 millones de euros se quedaran en la caja del Consell d’Eivissa y de los cinco ayuntamientos de la isla, las seis entidades que terminaron el año en superávit. A diferencia del Consell de Formentera, que gastó 3,48 millones de euros más de los que ingresó y es la única administración pitiusa con números rojos al acabar el año.
Según las liquidaciones de los presupuestos del año 2015 publicadas por el Ministerio de Hacienda, entre impuestos y transferencias de otras administraciones las entidades pitiusas consiguieron unos ingresos de 284,24 millones de euros, mientras que los gastos ascendieron a 253,76 millones, lo que supone un superávit global de 30,48 millones de euros.
El Ayuntamiento de Eivissa y el de Sant Josep gastaron el año pasado 10,23 y 10,08 millones de euros menos de lo que ingresaron, mientras que el desfase entre ingresos y gastos de los ayuntamientos de Santa Eulària, Sant Antoni y Sant Joan fue menor, concretamente de 3,65 millones en el caso de la Villa del Río, de 2,31 millones en el consistorio portmanyí y de 1,22 millones en el de Labritja.
Tasas e impuestos
Buena parte de esta diferencia hay que buscarla en que los ayuntamientos han ingresado más en tasas e impuestos que lo que previeron en sus presupuestos. De esta manera el Ayuntamiento de Vila presupuestó unos ingresos por este concepto de 34,91 millones de euros que, al final, se convirtieron en 46,1 millones. Algo similar pasó en Sant Josep, donde la previsión de ingresos procedentes de las contribuciones de sus residentes fuera de 21,85 millones y la recaudación final acabó siendo de 28,4 millones. Todas las instituciones pitiusas lograron recaudar más dinero de lo previsto en sus presupuestos.
En este mismo aspecto llama la atención que la recaudación final de tasas e impuestos por parte del Consell d’Eivissa y del Consell de Formentera (que no tienen tanta capacidad recaudatoria como los ayuntamientos) sea muy similar: 13,06 millones en el consell ibicenco y 13,64 en el de Formentera. Ambos por encima de lo presupuestado.
Cabe destacar que los presupuestos de 2015 fueron elaborados y aprobados por los anteriores equipos de gobierno, mientras que su liquidación se ha producido con los nuevos gobernantes surgidos de las elecciones locales del mes de mayo.
LA NOTA
Dos millones en inversión más de los previstos
En sus presupuestos de 2015, las siete administraciones pitiusas habían previsto una inversión total de 42,84 millones de euros, una cifra que tras la liquidación de los presupuestos aumentó hasta los 44,74 millones, casi dos millones más de los presupuestados. El Consell d’Eivissa y los ayuntamientos de Sant Antoni y Sant Josep han sido las administraciones que han invertido menos dinero del que previeron cuando aprobaron sus presupuestos. De hecho, el consistorio portmanyí presupuestó inversiones por valor de 4,31 millones de euros y sólo ejecutó 3,08 millones a lo largo de 2015. En el otro lado de la balanza se sitúa el Consell de Formentera, con 3,75 millones de euros en previsión y una liquidación final de 5,13 millones en inversiones, mientras que Santa Eulària fue el municipio que más invirtió con un total de 8,21 millones, más de dos millones más que los previstos.
3 comentarios
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Aquí la diferencia entre los incompetentes y los eficaces: Consell d’Eivissa y los ayuntamientos de Sant Antoni y Sant Josep han sido las administraciones que han invertido menos dinero del que previeron cuando aprobaron sus presupuestos. De hecho, el consistorio portmanyí presupuestó inversiones por valor de 4,31 millones de euros y sólo ejecutó 3,08 millones a lo largo de 2015. En el otro lado de la balanza se sitúa el Consell de Formentera, con 3,75 millones de euros en previsión y una liquidación final de 5,13 millones en inversiones, mientras que Santa Eulària fue el municipio que más invirtió con un total de 8,21 millones, más de dos millones más que los previstos.
Pues creo que no hace falta decir nada más, ya pueden empezar a: sanear las calles, limpiar la zona de figueretas, reparar el paseo de figueretas, cambiar los azulejos rotos de playa d'en bossa, mantener un alumbrado adecuado para las expectativas de tanto los que residimos en la isla todo el año como los turistas que pagan precios desorbitados... y un sinfín de cosas que no entiendo como puede ser que una localidad que recauda tantísimo dinero no invierte en mejorar la calidad de vida de todos.
Entonces deberíamos estar forrados no?,