Sant Carles homenajeó ayer a sus mayores de 80 años en una jornada festiva hecha por y para ellos. «Hoy es uno de los días más entrañables del año porque es un momento para juntarse, para buscar un motivo que les permita hacer una festividad con algo tradicional que vale la pena que se siga transmitiendo», dijo Salvador Losa, concejal de Sant Carles a las puertas de la iglesia donde a las 11 horas hubo misa de Tots Sants. Y es que las tradiciones y la cultura de esta localidad de la isla aún tienen mucho que enseñar a todos los que siguen llegando. En este sentido, Losa explicó que Sant Carles es uno de los municipios de la isla con mayor número de personas mayores, pero al mismo tiempo «la media de edad está rejuveneciendo por la cantidad de jóvenes que vienen a vivir». En la Parroquia de Sant Carles hay censados más de 200 mayores, pero no todos pueden acudir a celebrar este día, bien porque algunos son extranjeros o porque su condición física no se lo permite. Sin embargo, no podemos meter a todos en el mismo saco. «Mientras unos quieren cumplir los 80 para poder participar, otros que están cerca de los 90 no quieren venir porque dicen que no son tan mayores», señaló Losa. Catalina Marí, a sus 84 años, es un ejemplo de ello. «Este día es para nosotros. Me gusta porque no nos vemos casi nunca», dijo. Marí sabe que cada año hay más participación por parte de este colectivo que «cuando empezó la fiesta se hacía desde los 65 años, luego desde los 70 y hace unos años desde los 80. Entonces faltaban pocos para ser 100 mayores y ahora somos más de 200».

Entre la misa, la demostración por parte de la Colla de Ball Pagès de Sant Carles y la comida, decenas de familias festejaron ayer el 1 de noviembre. «Ver que las actividades que organizamos gustan y la gente se lo pasa bien es nuestra recompensa», dijo Juan Carlos Roselló, presidente de la asociación de vecinos quien aseguró que la participación fue mayor que en años anteriores.