El tramo de la E-10 sobre el que se redactará el nuevo proyecto de reforma. | DANIEL ESPINOSA

El Consell Insular de Eivissa publicó el pasado viernes el anuncio para licitar la actualización del proyecto constructivo de la primera fase de adecuación de la travesía EI-10 entre las rondas de Figueretes y Can Misses.

La licitación del proyecto tiene un presupuesto de 89.380,90 euros y se establece un plazo de ejecución de 9 meses a partir de la adjudicación del contrato.

Los pliegos de licitación indican que «el proyecto redactado deberá seguir las premisas establecidas en el Proyecto de urbanización del primer cinturón de Vila», redactado en 2009; e incluir el nuevo vial de acceso subterráneo al Cetis, conforme establece el convenio marco que firmaron el Consell Insular y el Ayuntamiento de Ibiza para la puesta en funcionamiento de esta infraestructura.

El Consell y el Ayuntamiento de Vila anunciaron en 2016 que se retomaba este proyecto con idea de ponerlo en marcha antes del final de la legislatura.

El pasado mes de febrero la consellera Pepa Marí explicaba la necesidad de redactar un nuevo proyecto de reforma del primer cinturón de ronda de Vila para «incorporar la construcción de la segunda entrada al Cetis», adecuarse al nuevo Plan General e incorporar las modificaciones de movilidad que impulsa el Consistorio de Vila.

Una década

En octubre de 2009 el Consell Executiu autorizó licitar la redacción del primer pliego de prescripciones técnicas de este mismo proyecto que se adjudicó el 9 de noviembre de 2010 por valor de 55.732,87 euros sin IVA.

El Consell Insular, bajo la presidencia de Xico Tarrés, aprobó y presentó el proyecto en el año 2011. Tenía un coste aproximado de 6,1 millones de euros. Llegó a publicarse que las obras se iniciarían a comienzos de 2012 y se concluirían a finales de ese mismo año.

La obra no obtuvo financiación durante la siguiente legislatura en la que presidió la institución el popular Vicent Serra.

El Proyecto de urbanización del primer cinturón de Vila abarca 4 fases para adecuar el tramo que va desde la rotonda de Can Cifre hasta la avenida de Sant Joan de Labritja, con idea de integrar el cinturón en el tejido urbano de Vila. El presupuesto previsto en el proyecto inicial era de 23 millones de euros e incluía un paseo central de 14 metros de ancho, la creación de carriles bici que conectaran la red urbana, zonas para instalaciones fotovoltáicas y nuevos aparcamientos.