Placas solares instaladas en el centro de salud de Santa Eulària. | Redacción Local

La Conselleria balear de Territori, Energia i Mobilitat ha recibido un total de 1.042 solicitudes a la convocatoria de subvenciones para el fomento de instalaciones de energía solar fotovoltaica para autoconsumo dirigida a particulares, entidades sin ánimo de lucro, pequeñas y medianas empresas y asociaciones empresariales.

Del total, 706 se han pedido en Mallorca, 246 en Menorca, 78 en Ibiza y 12 en Formentera.
Dado el incremento de solicitudes respecto al año pasado en un 85 %, el Consell de Govern aprobó, a principios de junio, ampliar con un millón de euros las ayudas para instalar placas fotovoltaicas al considerar insuficiente el importe de 1.800.000 euros destinado inicialmente.

De acuerdo con la convocatoria, los particulares pueden recibir subvenciones del 50 % del coste de las placas y las empresas, del 40 %.

12 placas en una vivienda
Gaby Machancoses decidió apostar hace poco más de cinco meses por las energías renovables. Aunque no llegó a tiempo a la convocatoria de ayudas del Govern, asegura que en tres o cuatro años amortizará la inversión hecha.

En este sentido, Machancoses explica que se ha gastado 3.000 euros en material, además de 1.500 en montaje y en la posterior legalización. «Tienes que pedir permiso al ayuntamiento del municipio en el que las quieres instalar y rellenar online un registro del Govern balear», señala.

Asimismo, en apenas unos meses ya ha notado el ahorro en la factura. «En mayo del año pasado pagué 160 euros y este año 36», indica, «y los kilovatios que no consumo cuando no estoy en casa, me los descuentan del consumo eléctrico a final del mes».

En su vivienda en Ibiza ha instalado un total de 12 placas que produce electricidad desde las 8 de la mañana hasta las 8 de la tarde. «Desde las 11 hasta las 19 horas me producen unos 2.000 vatios y es cuando aprovecho a conectar el aire acondicionado, la vitrocerámica, el agua caliente, la lavadora, etc y no pago nada de luz», matiza.

En caso de que necesitase luz fuera de esas horas, haría uso del servicio de Red Eléctrica. «A las 8 de la mañana produce como unos 100kW; si quiero enchufar, por ejemplo, la tostadora que necesita 100 vatios, cojo los 100 míos y el resto de Red Eléctrica», indica.

Esto significa que en ningún momento se queda sin electricidad en caso. De hecho, recordó que en caso de que el día salga nublado, las placas que tiene instaladas rinden la mitad.
Por suerte, en Ibiza contamos con unas 3.000 horas de sol al año y que haga mal tiempo puntualmente no es un problema para conseguir energía a través de fotovoltaicas.

Además, Machancoses explica que su sistema de placas es ‘inteligente’ y dispone de dos enchufes: «Cuando tiene energía y no se consume nada en casa, me calienta el agua o me recarga la moto, pero si viene una nube se para hasta que haya más potencia», subraya.
Este usuario apostó por este tipo de energía para proteger al medio ambiente y asegura que obtiene energía suficiente para responder a la demanda de las tres personas que habitan la vivienda.

Falta de información
Por otra parte, Machancoses dice que, cada vez más, hay personas interesadas en las fotovoltaicas que le preguntan para que les aconseje como instalarlas en su casa. «Creo que hay poca información al respecto, al contrario de lo que pasa con las ayudas, que están muy bien», dice. «La gente, con el impuesto al sol, tiene miedo. De las 10 personas que me han preguntado, ocho me han dicho que si no era ilegal», añade.