J.F. MESTRE/J.J. MONERRI El presunto cabecilla de la red de tráfico de hachís desarticulada en las tres Islas después de que tres vecinos de Eivissa supuestamente desembarcaran en Menorca 2.500 kilos de hachís sospechó que éstos le iban a traicionar y que al menos uno de ellos le robó tres millones de pesetas, destinados a pagar la mercancía.

Estos es al menos lo que se escucha en dos conversaciones telefónicas que grabó la Guardia Civil antes de culminar la operación en febrero de 1998. El principal acusado ha negado que una de las voces que se oye fuera suya. Los agentes que intervinieron en las escuchas, sin embargo, ratificaron que quien hablaba era Alberto Barber.

Dicha persona está siendo juzgado estos días en la Audiencia Provincial junto con otras once personas, entre ellos Manuel M. G., Enrique C.P. y Juan P.F., todos ellos vecinos de Eivissa y el último natural de esta isla. Once de los imputados se juegan cuatro años de cárcel de cada uno de ellos. Barber, seis años y seis meses.