La Audiencia ha absuelto al joven que el pasado lunes fue juzgado por el atraco a mano armada de la sucursal bancaria de Sa Nostra de Ignasi Wallis. El tribunal da la razón en su sentencia en todos los términos a la defensa de Manuel G.C., representada por el abogado José Luis del Valle, quien en la vista acreditó que la enfermedad mental que sufría el acusado desde 1995 hacía imposible su participación en el robo, un hecho que, a su juicio, reforzaba la presunción de inocencia.

«Las condiciones psicofisiológicas del acusado discuerdan altamente con las características atribuibles a quienes penetraron en la entidad , puesto que el relato ofrecido por las empleadas evidencia que se trataba de personas templadas y de reacciones ágiles, incluso en su locuacidad». Manuel G.C., que sufre una esquizofrenia paranoide, pierde el control de su persona cuando escucha varias voces a la vez, una situación que se produjo en el atraco cuando uno de los asaltantes apuntó a las empleadas con una escopeta de cañones recortados y otro se apoderaba de un botín de más de dos millones de pesetas. En este sentido la Audiencia destaca en su dictamen la «conducta impulsiva» del acusado, así como la «afección de sus facultades volitivas».