Nuno Miguel Gomes Valés, un joven portugués de 26 años, falleció ahogado ayer a las cinco de la tarde al sufrir un paro cardiaco mientras se bañaba en la playa de es Puet, en el término municipal de Sant Antoni.

Al parecer, este joven turista tenía por costumbre tomar el sol en el mar adoptando la posición llamada «del muerto», flotando y dejando que la corriente le llevara. Sus amigos, que le esperaban el la playa vieron que Nuno Miguel Gomes ya llevaba mucho tiempo en el agua, y uno de ellos fue a buscarle, descubriendo que el joven había fallecido.

El turista, que estaba alojado en el hotel Neptuno, fue trasladado rápidamente a la arena y allí se desplazó una ambulancia del Centro Médico Galeno, que no pudo hacer otra cosa que comprobar que el joven había fallecido.

Esta muerte se suma a la registrada ayer en la playa de Cala Salada, también en Sant Antoni, lugar en el que falleció ahogado un turista italiano que se encontraba pasando su luna de miel en la isla. En este caso, el joven llegó vivo a la orilla, aunque no pudo hacerse nada por su vida y murió por una parada cardiaca en la arena de la playa.