Los bomberos hallaron la casa después de que un vecino les esperara en este camino. Foto: V.F.

Un hombre que anteayer tarde resultó herido en Sant Josep con quemaduras en la cara y ambos brazos intentó por sus propios medios sofocar el incendio que se inició en su casa después de que al parecer un tronco de la chimenea rodara y prendiera en el mobiliario. Pidió que alguien llamara una ambulancia, pero al ver que no llegaba decidió coger un coche y trasladarse él mismo por sus propios medios al hospital. Toda la casa quedó afectada y los daños fueron grandes en la sala de estar.

Fuentes de Can Misses confirmaron ayer que durante la tarde-noche se atendió un caso de una persona, cuya identidad no ha trascendido, que llegó a Urgencias con quemaduras en su cuerpo. El paciente, de unos 30 años, quedó ingresado y estaba previsto que entre hoy y mañana se procediera a su traslado a la Unidad de Quemados del hospital valenciano de la Fe, lugar donde se continuaría el tratamiento para su recuperación. El incendio en el inmueble, ubicado cerca del kilómetro 4 de la carretera que une Eivissa con Sant Josep, comenzó sobre las siete y media de la tarde. Otra persona, una mujer, se encontraba en ese momento en la vivienda. Se disponía a bañarse cuando oyó los gritos pidiendo ayuda. A su vez fueron alertado varios vecinos a los que se solicitó que dieran aviso a una servicio de ambulancias y a los bomberos.

El Parque Insular recibió la alarma de fuego e una vivienda -sin notificarse que había un herido con quemaduras- sobre las 19'50 horas. Asimismo, no hay constancia de que algún servicio de ambulancias recogiera el aviso. Fuentes del Insalud aseguraron que el 061 no tenía registrado llamada alguna para un servicio en Sant Josep. Un tanto de lo mismo afirmaron fuentes de Ambulancias Insulares.

Ante la urgencia que supone un posible incendio en una vivienda, el Parque Insular actuó con rapidez y cuatro bomberos se trasladaron hacia la zona del inmueble. La casa pudo ser encontrada con dificultades después de que se produjera un segundo contacto telefónico y se informara de que salía al encuentro de los bomberos un vecino. Al llegar, se conoció que había un herido y que éste había decidido irse sin esperar ayuda. Los bomberos lograron sofocar el fuego sobre las nueve de la noche tras haberse quemado la sala principal.