Un joven de 26 años, Aisa Ahmed, de nacionalidad argelina, falleció ayer en Zaragoza al derrumbarse el inmueble en el que residía, una casa antigua de tres pisos ubicada en el número 15 de la calle Agustina de Aragón, en el casco histórico de la ciudad. El joven fue encontrado muerto sobre las cuatro de la tarde entre los escombros del edificio, después de varias horas de trabajo.

El jefe de Bomberos de Zaragoza, Augusto García, señaló que se desconocen las causas del derrumbe, que sucedió sobre las 12:00 horas. No obstante, parece ser que una máquina excavadora que realizaba labores de limpieza en un solar contiguo pudo influir en el siniestro. Los obreros que trabajaban junto a la casa relataron que el inmueble comenzó a derrumbarse por su parte trasera hasta que sólo quedó en pie aproximadamente la mitad del edificio.

La vivienda, de tres plantas, estaba habitada por entre diez y quince inmigrantes, que alquilaban las viviendas por habitaciones, al precio de 20.000 pesetas por cama. No obstante, en el tercer piso residían dos propietarios, uno de los cuales, Francisco Lorenzo, ayer por la mañana avisó al encargado de la obra del solar contiguo que si continuaban trabajando con máquinas se derrumbaría el edificio.