Un centenar de personas buscó ayer sin éxito al vecino de Santa Maria que lleva nueve días en paradero desconocido, después de que se perdiera cuando buscaba setas en la montaña.

Dos patrullas de la Guardia Civil, el helicóptero del Cuerpo, la Policía Local, Protección Civil, voluntarios y familiares 'peinaron' ayer la zona de Son Roig, mientras que otros efectivos se desplazaron a la Comuna de Bunyola. El sentimiento generalizado de estos equipos es de gran frustracción, ya que Francisco Coll Ferrer, apodado «Paliva», fue visto por última vez a primera hora de la tarde del sábado día 7 y desde entonces no se tienen noticias de él. La hipótesis más barajada es que el vecino de Santa Maria, que había sido operado de la cadera, se accidentó cuando regresaba solo al pueblo.

Para hoy la Guardia Civil sigue manteniendo el operativo de búsqueda, aunque se teme que debido a los días que ya han pasado el número de voluntarios y participantes baje.