La Brigada de Extranjería y Documentación del Cuerpo Nacional de Policía de Palma ha detenido a dos hermanastros de nacionalidad peruana que supuestamente traían inmigrantes a Mallorca aportando impresos falsificados y que además, una vez en la Isla, les obligaban a pagar un «impuesto» de 3.000 dólares.

Según explicó ayer en rueda de prensa el responsable de la citada brigada, Luis Enrique V.M., de 42 años, y Miriam Janette V.O., de 44, están acusado de un delito contra los derechos de los trabajadores y de falsedad documental, y ya han sido puestos a disposición judicial. La maquinaria policial se puso en marcha cuando los agentes encargados de velar por los inmigrantes descubrieron que una o varias personas estaban manipulando impresos oficiales para acoger a trabajadores extranjeros en Mallorca, de forma que los interesados recibían el visto bueno para poder viajar a la Isla y una vez aquí se encontraban con que todo era un engaño con fines económicos.

Miriam Janette había trabajado como limpiadora en una empresa, desde donde intentaba convencer a sus jefes de que tenía familiares en Perú que estaban ansiosos por llegar a España. Si la trampa no funcionaba y el empresario no rellenaba el impresión de invitación oficial, la mujer peruana se apropiaba de esos documentos y, en connivencia con su hermanastro, los falsificaba. De momento el Cuerpo Nacional de Policía ha confirmado cinco casos de esta naturaleza, pero se sospecha que el número es muy superior y que se irá incrementando a medida que avancen las diligencias. Algunos de los extranjeros que se beneficiaban de estos impresos falsos conocían el entramado, pero eran los primeros interesados en llegar como fuera a España; otros, en cambio, pensaban que se trataba de una oferta de trabajo real y eran cruelmente embaucados.

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